Es muy importante conocer las diferentes intensidades que existen en cuanto a la resistencia que ofrecen las cerdas del cepillo de dientes. Esos pequeños filamentos que encontramos en el cabezal suelen estar hechos de nylon, un material altamente maleable con el que se puede conseguir una mayor o menor dureza.

A través de esta completa guía vamos a ver cuáles son las diferentes durezas de los cepillos manuales, cuál es el cepillo de dientes más suave, y por qué estos son los más adecuados para la sensibilidad dental.

¿Qué es la dureza de un cepillo de dientes?

Un cepillo de dientes está compuesto por diferentes partes. Por un lado, tenemos el mango, que permite una perfecta sujeción y manejo durante el cepillado. A continuación, encontramos el cabezal, que es la parte que se introduce en la boca. Y por último tenemos las cerdas, o los pequeños filamentos encargados de arrastrar la suciedad de la superficie y entre los espacios de cada una de las piezas dentales.

Esta última parte, las cerdas de los cepillos de dientes, determina su dureza. Los filamentos de nylon del cepillo de dientes pueden ser más o menos firmes según las necesidades de cada persona.

Si bien un cepillo de alta dureza consigue eliminar fácilmente los restos de alimentos y el biofilm dental, también puede tener un aspecto negativo, ya que su uso inapropiado podría provocar daños sobre el esmalte y las encías.

Diferentes niveles de dureza en un cepillo dental

Cada persona tiene unas necesidades concretas a la hora de cepillarse los dientes. Hay quienes realizan un cepillado muy suave sin apretar demasiado el cepillo contra la superficie de los dientes y encías, y otros que lo hacen con mayor intensidad.

Las encías también pueden pasar por diferentes estados a lo largo de la vida. A veces están más sensibles y sangran con facilidad, mientras que en otros momentos gozan de una excelente salud y están más fuertes que nunca.

Para todos estos momentos y personas hay un tipo de cepillo de dientes ideal. Es importante saber cuándo recurrir a cada uno de ellos para conseguir una higiene bucodental completa, evitando dañar los tejidos adyacentes.

Cepillo de dientes Duro

El cepillo dental con cerdas duras ofrece una mayor resistencia en el cepillado. Sus cerdas son altamente rígidas y consiguen eliminar la suciedad fácilmente. Sin embargo, solo son aptos para aquellas personas que no ejercen mucha presión durante el cepillado, y que, por supuesto, gozan de una excelente salud bucodental sin presentar problemas de sensibilidad.

Cepillo de dientes Medio

Los cepillos dentales medios son los que se usan con mayor frecuencia. Son algo más suaves, pero aun así proporcionan cierta rigidez que aumenta la eficiencia del cepillado. Son igualmente idóneos para cualquier persona que no tenga problemas de sensibilidad en dientes o encías.

Cepillo de dientes Suave

Los cepillos de dientes suaves tienen unos filamentos más blandos, ideales para las encías delicadas y dientes sensibles. Consiguen eliminar perfectamente los restos de alimentos y evitan la formación de biofilm en dientes y encías de una manera efectiva.

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Cepillo de dientes Extra Suave

Por último, tenemos los cepillos dentales extra suaves, que son los mejores en caso de encías con tendencia al sangrado o para dientes altamente sensibles. Sus filamentos son los más suaves, y previenen cualquier tipo de daño durante el cepillado, incluso cuando se ejerce una elevada presión.

¿Qué cepillo dental usar para los dientes sensibles?

La dureza de los cepillos de dientes más recomendada para la población general va de media a blanda. Esto dependerá de las preferencias de cada persona y de la forma en que suela cepillar sus dientes, realizando una mayor o menor fuerza.

Sin embargo, en el caso de los dientes sensibles es necesario tener otro tipo de consideraciones. Con el fin de limitar al máximo el daño que se produce en el esmalte dental y en las encías durante el cepillado, es más recomendable recurrir a los cepillos suaves o extra suaves.

Como ya hemos visto, en casos de sensibilidad dental, los mejores cepillos dentales son los que tienen las cerdas suaves. En cambio, en personas que tienen riesgo elevado de sangrado durante el cepillado o dientes altamente sensibles, los cepillos de cerdas extra suaves son los más indicados.

Cualidades de los cepillos de dientes suaves

Puede parecer que solo los cepillos dentales de dureza alta o media ayudan a eliminar fácilmente los restos de alimentos de los dientes, pero los cepillos suaves y extra suaves son igualmente efectivos, y al mismo tiempo tienen otras cualidades altamente beneficiosas para el esmalte y las encías.

Un cepillo dental de cerdas suaves o extra suaves está diseñado para ejercer menor fricción sobre la superficie de los dientes. Gracias a esto disminuimos el riesgo de erosión del esmalte, sobre todo en usuarios que suelen aplicar más fuerza con el cepillo manual durante el cepillado.

Además, los cepillos de dientes suaves contienen filamentos más flexibles y con mayor rango de movimiento, capaces de cubrir toda la superficie de los dientes y adicionalmente masajear ligeramente las encías. Con ellos logramos eliminar de manera efectiva el biofilm dental y los restos de alimentos, asegurando una completa higiene bucodental.

La entrada Dureza de los cepillos manuales y cuál usar para dientes sensibles se publicó primero en Laboratorios KIN.

Por suerte, en la actualidad existen en el mercado diferentes productos de cuidado bucodental que te pueden ayudar a combatir ese dolor punzante que provocan los estímulos externos como el frío, el calor o los alimentos de elevada acidez. Desde KIN te contamos todo lo que debes saber para elegir un buen dentífrico para la sensibilidad dental.

¿Qué provoca la sensibilidad dental?

Los dientes están protegidos por una barrera natural que se conoce como esmalte. El esmalte dental es el tejido más resistente del cuerpo humano, sin embargo, no está exento de sufrir diferentes daños, provocados principalmente por una serie de malos hábitos que se repiten a diario.

Justo debajo del esmalte dental se encuentra la dentina, otro tejido de alta dureza, pero que contiene miles de microcanales que conectan el exterior del diente con la pulpa. Cuando el esmalte está dañado en alguna zona concreta y la pulpa pierde su protección, los estímulos del exterior pueden pasar por estos pequeños canales, llegando hasta el nervio.

La sensibilidad dental se debe a la exposición del nervio ante el frío, el calor, sensaciones ácidas o estímulos mecánicos. Cuanto más débil es la capa de esmalte, mayor riesgo de hipersensibilidad tendrá el paciente.

¿Quieres saber cómo afecta el frío a nuestros dientes? No te pierdas la completa guía que encontrarás en el blog de KIN en la que te contamos todos los detalles.

¿Cómo te ayuda una pasta dental a tratar la sensibilidad?

En la actualidad existen múltiples productos para combatir la sensibilidad dental, como es el caso de los dentífricos. Concretamente hay dos tipos de dentífricos para dientes sensibles, según la función concreta que estos tengan.

El primer grupo son las pastas de dientes que minimizan las molestias, desensibilizando de manera momentánea las terminaciones nerviosas que quedan expuestas. Suelen ser de rápido efecto y tras su uso el paciente logra un alivio casi inmediato.

El segundo grupo son las pastas dentales para la sensibilidad que consiguen una oclusión progresiva de los microtúbulos de la dentina. Gracias a su acción, los estímulos externos no pueden entrar al interior del diente, ya que los canales quedan ‘taponados’. En este caso el efecto no es tan rápido, pero dura más en el tiempo.

¿Cómo funciona una pasta de dientes para la sensibilidad dental?

Si quieres saber cuál es la mejor pasta para dientes sensibles, es necesario que busques el producto que mejor se adapta a tu caso concreto. Cada paciente tiene sus propios requerimientos a la hora de tratar los problemas de hipersensibilidad dental.

Aunque hay productos que son muy efectivos para evitar o aliviar el dolor lacerante asociado a la hipersensibilidad, para conseguir un efecto duradero es importante seguir un tratamiento completo.

Una pasta de dientes para la sensibilidad dental hace su efecto poco a poco, disminuyendo la sensación con el paso de los días, al mismo tiempo que favorece la recuperación del esmalte y el resto de los tejidos dañados.

Por este motivo es recomendable usar este tipo de dentífricos a diario, cepillando los dientes al menos 3 veces al día, siempre después de cada comida. Gracias a su composición, son dentífricos que ayudan a eliminar la placa dental, protegiendo dientes y encías de posibles daños.

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¿Cómo elegir la mejor pasta para dientes sensibles?

Como ya hemos visto, hay dos funciones fundamentales que tienen las pastas dentales para dientes sensibles, y que son de gran interés para cualquier tipo de usuario: disminuir la sensación de dolor ante los estímulos externos y provocar una obstrucción progresiva de los túbulos de la dentina que quedan expuestos.

Para lograr este efecto, existen una serie de ingredientes en los que debemos fijarnos para dar con la mejor pasta para dientes sensibles. Uno de los más habituales es el nitrato potásico, componente fundamental de los productos de la línea SensiKIN. Junto a este, destacamos la provitamina B₅ y la vitamina E acetato, que mantienen las encías mucho más sanas y fuertes.

De la misma forma, es importante no descuidar el contenido en flúor, que en un dentífrico para uso en adultos debe ser del orden de 1450 ppm F^–. La función del flúor será doble, como en cualquier otra pasta de dientes para la higiene bucodental: ayudar en la remineralización del esmalte dental y facilitar la obstrucción progresiva de los túbulos dentinarios.

¿Cómo utilizar una pasta dental y obtener la máxima eficacia?

Para una correcta higiene y protección extra para los dientes sensibles, este tipo de dentífricos deben usarse en cada cepillado, como mínimo 3 veces al día, preferiblemente después de cada comida y antes de acostarse.

Es importante asegurarse de que el cepillado se realiza durante 2 minutos, cubriendo toda la superficie de las piezas dentales y con un cepillo dental de cerdas suaves. Complementa el cepillado con el uso de accesorios como seda dental o cepillos interdentales.

Junto con el dentífrico, el uso de un enjuague bucal aumenta aún más la eficacia del cepillado. Escoge un producto que contenga nitrato potásico y flúor para aliviar la sensibilidad de una manera efectiva, mejorando la calidad del esmalte cada día.

Si tienes cualquier duda sobre cuál es la mejor pasta para dientes sensibles que puedes utilizar, acude a tu odontólogo, quien te ayudará a encontrar un tratamiento a tu medida.

La entrada ¿Cuál es la mejor pasta dental para dientes sensibles? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Seguro que estás familiarizado con la sensibilidad dental frente al consumo de alimentos y bebidas frías. No obstante, hay personas que, en invierno, con la bajada de las temperaturas, experimentan una sensación aún mayor con el simple hecho de enfrentarse al frío ambiental.

¿Quieres descubrir cómo afecta el frío a nuestros dientes? Te contamos todo lo que debes saber sobre la sensibilidad dental al frío, y cómo combatirla con unas sencillas recomendaciones.

¿Qué es la sensibilidad dental?

La sensibilidad dental, o hipersensibilidad dentinaria, es un dolor agudo que se produce en el nervio del diente a causa de la exposición de la dentina. Cuando ésta entra en contacto con un estímulo externo, se notan unos pinchazos momentáneos muy característicos.

La dentina es el segundo tejido más duro del cuerpo humano, justo después del esmalte dental que la recubre. Cuando el esmalte está dañado o pierde grosor, los estímulos del exterior pueden atravesar los miles de minúsculos canales que hay en la dentina, que conectan de manera directa con las terminaciones nerviosas de la pulpa del diente.

Se habla específicamente de sensibilidad dental cuando este aumento de la sensibilidad en el diente no está relacionado con una patología bucal específica, como la caries o una infección en la encía. En cuyo caso habría que actuar de una manera muy diferente.

¿Por qué duelen los dientes cuando hace frío?

La función de la dentina es proteger y al mismo tiempo conectar con el exterior el tejido que se encuentra en el núcleo de cada diente, conocido como la pulpa. De manera natural, la dentina está cubierta por el esmalte y la encía, pero cuando estas dos barreras de protección fallan, las terminaciones nerviosas del diente quedan al descubierto.

La dentina de los dientes puede quedar expuesta por varios motivos, provocando una reacción al frío en los dientes. La gran mayoría tiene que ver con el estilo de vida y ocurren poco a poco sin que los pacientes se den cuenta del daño.

• Cepillado inadecuado con más fuerza de la necesaria o uso de un cepillo dental con cerdas muy duras que desgastan el esmalte o provocan retracción de la encía.
• Uso de dentífricos altamente abrasivos que dañan el esmalte dental.
• Consumo frecuente de bebidas y alimentos ácidos, como bebidas carbonatadas, zumos o frutas cítricas.
• Deterioro del esmalte dental por bruxismo.
• Consumo de determinados medicamentos y tratamientos médicos que dañan el esmalte dental o producen irritación en las encías.
• Enfermedades que provocan un medio extremadamente ácido en la cavidad oral, tales como la hernia de hiato, el reflujo o la bulimia nerviosa.

Efecto de la temperatura en los dientes

Como ya hemos visto, la dentina es un tejido altamente sensible a los cambios de temperatura. Está llena de diminutos canales que conducen directamente al interior del diente, por los que pueden entrar los estímulos del exterior, provocando un aumento de la sensibilidad en el nervio.

Además de las molestias momentáneas que sufre el paciente con sensibilidad dental en el momento de someterse a un estímulo externo, si este problema no es tratado correctamente, los daños en los tejidos podrían ir a más con el paso del tiempo.

Debido a las temperaturas extremas, como es la exposición constante al frío y al calor, los tejidos internos de los dientes se expanden y se contraen. Esta situación podría provocar pequeñas grietas tanto en el esmalte como en la propia dentina, que poco a poco se irán extendiendo y empeorando la situación.

¿Cómo aliviar la sensibilidad en los dientes?

El efecto que tiene el frío en los dientes puede tratarse de manera adecuada encontrando la solución más efectiva para cada paciente.

Además de las visitas regulares al dentista, con la finalidad de hacer un diagnóstico precoz para cualquier tipo de problema bucodental, hay otras recomendaciones que se pueden llevar a cabo cambiando o adquiriendo unos simples hábitos:

Higiene bucodental

Mantener una buena higiene bucodental todo el año, en invierno y en cualquier época del año, es esencial para proteger los dientes contra el frío. Una boca sana disminuye el riesgo de sufrir cualquier tipo de enfermedad bucal que afecte directamente la integridad del esmalte dental y de las encías.

Junto con el cepillado dental después de cada comida, es recomendable complementar la higiene oral con el uso de seda dental, cepillos interdentales y enjuague bucal. Existen productos específicos para tratar la sensibilidad dental, previniendo su aparición o minimizando de manera puntual las molestias ocasionadas al consumir alimentos fríos o calientes.

Tampoco hay que olvidar cambiar el cepillo de dientes cada 3 meses, optando por un cepillo de filamentos suaves, mucho menos abrasivos para los dientes y las encías.

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Cambio de hábitos

Para conseguir la mejor protección en los dientes desde fuera, es necesario cuidarlos también desde dentro. Dejar a un lado determinados hábitos diarios que podrían favorecer la sensibilidad dental al frío es clave para que los dientes gocen de una mejor salud. Entre ellos destacamos los siguientes:

• Seguir una alimentación sana y equilibrada, rica en nutrientes esenciales para la salud de dientes y encías. Algunos de los nutrientes más importantes para fortalecer el esmalte de los dientes son el calcio, la vitamina D o la vitamina A.
• Evitar o limitar el consumo de alimentos ácidos o excesivamente azucarados, ya que contribuyen a la erosión del esmalte dental, además de favorecer el crecimiento de bacterias que provocan caries e infecciones en las encías.
• Evitar hábitos nocivos como el consumo de alcohol y el tabaquismo.
• Tratar el bruxismo o el acto de apretar y rechinar los dientes, relacionado con el estrés.
• Evitar el consumo de alimentos y bebidas muy frías.
• En los meses de más frío, respirar preferiblemente por la nariz, cubriendo la boca para que el contacto con el frío ambiental sea menor.

Si tienes cualquier duda sobre la sensibilidad dental al frío, consúltalo directamente con tu dentista. Ahora que ya sabes cómo afecta el frío a los dientes, tienes en tus manos todas las herramientas necesarias para combatir este problema y no dejar que afecte negativamente en tu vida diaria.

La entrada ¿Cómo afecta el frío a nuestros dientes? se publicó primero en Laboratorios KIN.

La sensibilidad dental es un problema que afecta a gran parte de la población. Detectarla no es complicado. Ante la mínima señal es importante actuar a tiempo para proteger lo antes posible las diferentes estructuras de los dientes, empezando desde fuera.

¿Tú también tienes los dientes sensibles? Descubre todo lo que debes saber sobre el cuidado del esmalte y su relación con la sensibilidad dental.

¿Qué es el esmalte dental?

El esmalte dental es un tejido muy duro que recubre la capa externa de cada una de las piezas dentales. Su principal función es la de aportar una dureza elevada para favorecer el proceso de masticación de los alimentos.

Así mismo, el esmalte dental es el encargado de proteger los dientes frente a temperaturas extremas, tanto frío como calor, pH excesivamente ácidos, y por supuesto también ante los estímulos mecánicos.

Si bien cada persona tiene un tipo de esmalte más o menos fuerte o grueso, establecido de manera genética, es importante hacer un buen mantenimiento de este tejido a lo largo de toda la vida.

El principal problema es que el esmalte no se puede regenerar por sí mismo. Con el paso del tiempo se va desgastando y debilitando, a través de un proceso natural que, si no se cuida adecuadamente, se verá acelerado por culpa de una serie de malos hábitos.

¿Por qué se produce la sensibilidad en los dientes?

La sensibilidad dental es un dolor agudo que se produce en los dientes debido a su exposición a ciertos estímulos térmicos, químicos o táctiles. Es una patología bastante frecuente en adultos jóvenes de entre 20 y 45 años, aunque también puede darse en niños y adultos mayores.

Esta forma de sensibilidad puede tener varios niveles en cada persona. El tipo de sensibilidad en los dientes también puede ser diferente, variando ante estímulos externos frecuentes como el frío, el calor, exposición a alimentos dulces, ácidos, o a través de sensaciones táctiles por contacto directo.

A veces la sensibilidad dental puede ser pasajera, con un tiempo de duración corto hasta que las molestias desaparecen. Si quieres saber más sobre cuánto tiempo puede durar la sensibilidad dental, te lo contamos en el blog de KIN.

¿Cómo saber si tengo sensibilidad dental?

Los dientes están compuestos por varias capas de tejido. El más exterior, el esmalte, es el más duro, encargado de proteger las piezas dentales. En el interior se encuentra la dentina, la cual contiene miles de terminaciones nerviosas, que son las responsables de la sensibilidad dental.

Cuando el esmalte es muy fino o tiene algún tipo de daño, la dentina queda expuesta a los estímulos externos. Al principio los síntomas son más débiles y pueden pasar desapercibidos. Pero con el paso del tiempo se van haciendo notar más y más.

Por lo general, los síntomas de sensibilidad dental que describe la mayoría de los pacientes son los siguientes:

• Dolor punzante ante un estímulo leve.
• Duración muy corta del dolor ante el estímulo en cuestión.
• Localización inmediata de la zona donde se nota el dolor.

Si sueles notar un dolor agudo e intenso en la misma zona de la boca siempre que tomas un alimento frío, caliente o muy ácido, es el momento de actuar y descubrir cómo fortalecer el esmalte de los dientes de la manera más efectiva.

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Reforzar el esmalte de los dientes

Sin duda, la mejor manera de prevenir y evitar la sensibilidad dental es seguir una correcta higiene bucodental. Para ello existen múltiples herramientas y productos de higiene oral específicos que ayudan a proteger el esmalte.

¿Quieres saber cómo fortalecer el esmalte de los dientes día a día? Sigue estas recomendaciones:

Higiene bucodental diaria

Para cuidar tanto el esmalte dental como las encías y la salud de la boca en general, es muy importante asegurar un correcto cepillado después de las comidas. Elige un cepillo de dientes específico con filamentos suaves o muy suaves, para cepillar los dientes de forma delicada sin dañar la capa más superficial.

Elimina durante el cepillado todos los restos de alimentos y biofilm dental que se acumula en la boca. Puedes ayudarte de un dentífrico especial de cualquiera de nuestras gamas para la sensibilidad dental que favorezca el endurecimiento del esmalte.

Alimentación para reforzar el esmalte

No hay que olvidar que el esmalte es un tejido vivo que forma parte de nuestro organismo. Como el resto de los tejidos, también necesita unos nutrientes concretos para mantenerse fuerte.

Los alimentos con un alto contenido en calcio son buenos para los huesos y también para los dientes, promoviendo la remineralización natural del esmalte.

Evita los alimentos ricos en azúcar y ácidos que dañan el esmalte y decántate por una alimentación variada incluyendo productos ricos en vitaminas y minerales.

Remineralización del esmalte

En determinados pacientes es posible realizar una remineralización de los dientes a través del uso de productos específicos o de un tratamiento profesional.

Los productos con flúor como dentífricos y enjuagues bucales están diseñados para fortalecer el esmalte a diario y también para repararlo cuando el daño es leve. Estos son esenciales desde la infancia y a lo largo de toda la etapa adulta, ajustando el contenido de flúor según la edad y las necesidades de cada persona.

Consulta con tu dentista cuáles son las opciones para prevenir y tratar la sensibilidad dental, y cómo fortalecer el esmalte de los dientes a través de una pequeña ayuda extra. Los dientes son para toda la vida, así que no dudes en extremar al máximo su cuidado para mantenerlos en perfectas condiciones el máximo tiempo posible.

La entrada ¿Cómo fortalecer el esmalte de los dientes? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Los cambios bruscos de temperatura, y los alimentos excesivamente ácidos o azucarados pueden causar dolor y diferentes molestias en los dientes. Si sufres de dientes sensibles, conocer cuáles son estos alimentos te ayudará a prevenirla, favoreciendo la recuperación progresiva del esmalte dental dañado.

Descubre por qué se produce, la relación entre alimentos y la sensibilidad dental, y de qué manera puedes mejorar tu día a día para que nada te limite.

¿Qué es la sensibilidad dental?

Cuando hablamos de sensibilidad dental nos referimos de manera específica al dolor agudo y localizado que se produce en una parte concreta de la boca. Este es descrito por el paciente como un pinchazo, muy breve pero intenso, cuando se produce el contacto del diente afectado con un estímulo térmico, físico o químico.

La sensibilidad dental se produce cuando la dentina, o tejido interno del diente, queda expuesta al medio oral. Si bien el dolor agudo suele durar apenas unos segundos, el tiempo de duración de la sensibilidad dental, desde que comienza hasta que desaparece, varía en cada persona.

En la actualidad se calcula que 1 de cada 7 adultos de entre 18 y 40 años la sufre, con un incremento de los pacientes jóvenes cada vez mayor.

¿A qué se debe el aumento de los casos de sensibilidad dental? Aunque los factores ambientales pueden ser variados, la causa más frecuente es el consumo de alimentos y bebidas que erosionan el esmalte y lo van desgastando progresivamente. Es aquí donde entra en juego el tipo de alimentación.

Sensibilidad dental y alimentación

Como ya hemos avanzado, uno de los principales motivos del incremento de pacientes que sufren sensibilidad dental en los últimos años es el consumo de ciertos alimentos y bebidas. Ya sean alimentos dulces que son fermentados por las bacterias de la dieta, como sustancias que de por sí tienen una acidez elevada, afectan al estado del esmalte dental.

Un pH bajo, o acidez elevada, tiene un efecto negativo sobre el esmalte que protege los dientes. Con el tiempo se van perdiendo los minerales que conforman el esmalte, dejando expuesta la dentina, la parte más interna del diente.

Si bien en la parte externa de los dientes, el esmalte, no existen terminaciones nerviosas, la dentina está repleta de ellas. Esto hace que los estímulos exteriores, como el frío, el calor, y otras sensaciones químicas o mecánicas, se lleguen a notar en el interior del diente.

Aunque es una sensación bastante incómoda, esto no es lo peor. Cuando la dentina se expone al exterior, los dientes son más vulnerables a las bacterias, aumentando el riesgo de caries y de enfermedad periodontal.

Los 5 alimentos que favorecen más la sensibilidad dental

El esmalte dental es un tejido extremadamente fuerte y resistente. De hecho, es el tejido más duro de nuestro organismo. Sin embargo, no debemos olvidar que es un tejido vivo y en constante cambio, por lo que también es vulnerable si no se cuida correctamente.

De manera natural, el esmalte se va desgastando con el tiempo al consumir alimentos, debido a la masticación. Sin embargo, en los últimos años se ha visto que la dentadura de cada vez más jóvenes sufre un desgaste mayor al que correspondería a su edad, debido a algunos alimentos y bebidas que se toman frecuentemente en la dieta.

Está demostrado que los alimentos muy calientes, fríos, ricos en azúcar o con una elevada acidez causan molestias en personas con dientes sensibles. La recomendación es evitarlos, o al menos limitar su consumo, si sufres de dientes sensibles o si quieres mantener la integridad del esmalte de tus dientes.

¿Cuáles son los alimentos que más favorecen la sensibilidad dental? Veámoslos uno a uno:

Dulces

Por su elevado contenido en azúcar, los dulces son los alimentos que más favorecen la sensibilidad dental. Los restos azucarados que quedan en la boca tras su consumo son fermentados por las bacterias bucales, quienes liberan ácidos que provocan el deterioro del esmalte.

Helados

Además de su contenido en azúcar, los helados provocan sensibilidad dental por su temperatura fría, por lo que las personas con hipersensibilidad dentinaria deberían evitarlos en la medida de lo posible.

Zumos y refrescos

Lo mismo ocurre con los zumos, refrescos y otras bebidas azucaradas. Su contenido en azúcar es elevado, pero incluso los más naturales tienen un pH ácido que afecta de manera directa la integridad de los dientes.

Café

Muy consumido en todo el mundo, el café no solo tiene el inconveniente de colorear los dientes. Por su nivel de acidez, la temperatura a la que se suele tomar y la tendencia de añadirle azúcar o edulcorantes, le hace una de las bebidas más relacionadas con problemas de sensibilidad dental.

Bebidas alcohólicas

No debemos olvidar otro de los grandes responsables de la sensibilidad dental en adultos jóvenes: el alcohol. Las bebidas alcohólicas como los licores son ricas en azúcares, mientras que otras como la cerveza o el vino presentan un elevado carácter ácido que estimula la sensibilidad.

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Recomendaciones para proteger los dientes y evitar la sensibilidad dental

Ahora que ya sabes cuál es la relación entre los alimentos y la sensibilidad dental, puedes tomar las medidas necesarias para cuidar el esmalte de tus dientes.

Por un lado, los expertos en cuidado de la salud bucodental recomiendan evitar o limitar el consumo de bebidas y alimentos ácidos como los que hemos visto. En su lugar, aumenta en tu dieta otros alimentos protectores para el esmalte dental como lácteos, frutas y verduras.

Sigue las indicaciones de tu dentista para realizar un correcto cepillado. Es muy importante que, para no desgastar el esmalte, no cepilles tus dientes fuertemente, decantándote por un cepillo de cerdas suaves, más gentil con tus dientes.

En el mercado encontrarás una gran variedad de productos de higiene bucodental especialmente formulados para ayudar a disminuir las molestias de la sensibilidad dental. La línea SensiKIN incluye pasta dentífrica, enjuague bucal, spray bucal y gel, que permite una higiene oral completa sin sustancias abrasivas que cuidan el esmalte dental.

El consumo de alimentos y la sensibilidad dental no tienen por qué convertirse en un problema que limite tu día a día. Trata los síntomas de la manera más sencilla y eficaz para disfrutar de la mejor salud bucodental.

La entrada ¿Sabías que estos alimentos pueden provocar sensibilidad dental? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Conociendo el origen de la sensibilidad dental es posible saber si se trata de una molestia pasajera o si es preciso actuar porque el esmalte dental esté dañado. Vamos a ver cuáles son sus motivos principales y cuál debería ser la duración estimada de la sensibilidad dental.  

¿Qué es la sensibilidad dental?

La sensibilidad dentinaria o dental consiste en un dolor agudo y localizado que se produce en una zona concreta de la boca. Se nota como un pinchazo breve pero intenso, provocado por el contacto con un agente físico, químico o térmico externo con el diente afectado. 

La mejor forma de prevenir y tratar la sensibilidad dental es prestando especial atención al cuidado de la salud bucodental diaria. Sin embargo, hay ocasiones en las que es imposible evitar que esta aparezca, y su duración puede variar bastante. 

¿Por qué aparece la sensibilidad dental?

La función del esmalte que recubre los dientes es proteger los tejidos internos frente a las agresiones del exterior. Cuando el esmalte se ve dañado, la dentina queda al descubierto. Este tejido está compuesto por miles de terminaciones nerviosas que están relacionadas con la sensibilidad del diente. 

Los estímulos del exterior pueden penetrar en la dentina a través de canales microscópicos actuando sobre el nervio. Esto conlleva la aparición de una pequeña punzada, que es lo que se conoce como sensibilidad dental. 

¿Y por qué puede quedar la dentina al descubierto? Existen dos principales razones: 

• Por el desgaste progresivo del esmalte. 
• Debido a la recesión de las encías, que deja la raíz del diente al descubierto. 

Si quieres saber más sobre las causas de la sensibilidad dental, sigue indagando en el blog de KIN. 

¿Cuánto tiempo dura la sensibilidad dental?

La sensibilidad dental puede convertirse en un problema crónico cuando el esmalte de las piezas dentales se ve dañado. Esto está relacionado con múltiples causas como las enfermedades periodontales, la caries o fractura de las piezas dentales, el desgaste del esmalte por la edad o por malos hábitos, o por el bruxismo, entre otras. 

En estos casos, la sensibilidad dental no desaparece por sí misma. Es necesaria la intervención del dentista para aplicar el tratamiento más adecuado y reforzar la barrera natural de la dentina. 

Sin embargo, en otras ocasiones la sensibilidad dental es pasajera, aumentando durante un periodo de tiempo para después desaparecer. 

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Sensibilidad dental por brackets

La colocación de los brackets del aparato de ortodoncia directamente sobre los dientes que se desean corregir puede aumentar su sensibilidad. Si bien las molestias de los brackets normales duran tan solo entre 3 y 4 días, los brackets linguales de incógnito puede desarrollar molestias hasta 2 semanas después. 

Sensibilidad de un empaste

Tras someterse a un empaste o cualquier otro tratamiento dental, aparece una sensibilidad que va disminuyendo con el tiempo. El proceso puede durar entre 2 y 3 meses hasta que las molestias desaparecen por completo. En caso de que el dolor persista, es recomendable consultarlo con el dentista. 

Sensibilidad por blanqueamiento dental

Otro de los principales motivos de la sensibilidad dentinaria es la aplicación de un tratamiento de blanqueamiento. Es normal que la sensibilidad aumente durante y después de haber finalizado el tratamiento, desapareciendo en cuestión de horas o de días. 

Sigue las instrucciones de tu odontólogo en todo momento para prevenir la inflamación de los tejidos y aliviar en la medida de lo posible la sensibilidad temporal. 

Tratamiento para la sensibilidad dental temporal

El primer paso para tratar la sensibilidad dental es consultar la causa con tu dentista. De esta manera se puede realizar el mejor diagnóstico adaptando el tratamiento de forma personalizada. 

Tanto para tratar la sensibilidad dental temporal, como para prevenir su aparición por los motivos más habituales que hemos mencionado, el uso de la pasta de dientes y el enjuague bucal SensiKIN son un excelente remedio para aliviar las molestias. 

Esta línea de KIN específica para el tratamiento de la sensibilidad dental ayuda a combatir el biofilm dental y al mismo tiempo desensibiliza los nervios de la pulpa dental. Previene las molestias ocasionadas durante el cepillado y permite una completa higiene bucodental. 

Además de la pasta y el colutorio, la línea SensiKIN cuenta con un gel dental y un spray bucal que se aplican directamente en la zona afectada. Su función es la de desensibilizar la dentina, evitando que aparezca dolor ante determinados estímulos externos. 

Para reducir la sensibilidad dental, tu dentista podrá ayudarte a encontrar la solución perfecta. Mientras tanto, los productos de la línea SensiKIN se convertirán en tu mejor aliado. 

La entrada ¿Cuánto tiempo puede durar la sensibilidad dental? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Sin embargo, a diferencia de lo que a veces se piensa, la sensibilidad dental se puede prevenir y tratar. El primer paso es detectar la raíz del problema para encontrar el tratamiento más eficaz según las necesidades de cada paciente. Nuestras líneas Cariax Desensibilizante y SensiKIN ofrecen cuidados específicos en situaciones de sensibilidad dental.

¿Qué es la sensibilidad dental?

También conocida como hipersensibilidad dentaria, consiste en un dolor agudo que se produce en una zona concreta de la boca. Se nota como un pinchazo breve pero muy incómodo, provocado por un estímulo externo como puede ser el contacto con frío o calor directamente sobre el diente.

Si bien las piezas dentales suelen estar protegidas ante este tipo de sensaciones incómodas, cuando la parte interior del diente, la dentina, queda desprotegida y entra en contacto con cualquier estímulo externo, se produce un dolor que puede variar en cuanto a intensidad y duración.

La dentina es el tejido del diente que se encuentra debajo del esmalte y contiene miles de túbulos dentinarios, que de alguna manera conectan la parte exterior del diente con las terminaciones nerviosas que se encuentran en su interior. Cuando la dentina está expuesta, los estímulos externos como el frío o calor son percibidos por el nervio del diente produciendo sensibilidad dental.

Según la definición que hace el Colegio de Higienistas de Madrid de la hipersensibilidad dentinaria, los estímulos externos que la producen pueden ser térmicos, químicos o táctiles. El nivel de sensibilidad varía según el tipo y la localización del daño en el esmalte dental.

Los síntomas más comunes

¿Cómo puedo saber si tengo sensibilidad dental para actuar en consecuencia? El tipo de dolor o molestia que presenta esta afección es fácilmente reconocible.

El síntoma más común para la detección de la sensibilidad dental es la aparición de un dolor intenso y localizado. Este se presenta como una punzada muy molesta, como respuesta a un estímulo externo, o incluso espontáneo.

Causas de la sensibilidad dental

Aunque existen factores genéticos que hacen que algunas personas tengan mayor predisposición a sufrir sensibilidad en los dientes, la gran mayoría de causas se relacionan con el estilo de vida y los hábitos de higiene bucal diaria.

Entre las causas principales de sensibilidad dental en la población joven destacan las siguientes:

• Cepillado dental incorrecto, aplicando una elevada presión que provoca desgaste del esmalte dental o retracción de la encía.
• Uso de pastas dentales altamente abrasivas, que pueden desgastar el esmalte y exponer la dentina.
• Tratamientos de blanqueamiento dental que aumentan la sensibilidad durante un periodo determinado.
• Consumo de alimentos y bebidas de elevada acidez, como zumos, refrescos y otras bebidas azucaradas o carbonatadas.
• Reflujo gastroesofágico que acidifican la cavidad oral, dañando el esmalte.
• Desgaste de las piezas dentales debido al bruxismo o rechinado de los dientes.
• Caries o roturas del diente que dejan expuesta la dentina.
• Empastes desgastados.

De la misma forma, es frecuente sufrir de una hipersensibilización dental tras un tratamiento odontológico como puede ser una cirugía mucogingival, una ortodoncia o la colocación de un empaste. Este tipo sensibilidad es pasajera y va cesando con el paso de los días.

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¿Cómo evitar los dientes sensibles?

Según la causa principal que la provoca, son muchos los tratamientos de prevención a los que poder recurrir para evitar ese dolor dental tan molesto.

Una de las primeras medidas es asegurar una correcta higiene bucodental.

Poniendo en práctica la técnica de cepillado más correcta, así como el uso de una pasta dentífrica no abrasiva para no dañar el esmalte ni provocar la retracción de las encías.

También es importante para cualquier paciente que padezca sensibilidad dental el seguir una dieta baja en alimentos y bebidas azucaradas, así como limitar el consumo de alimentos ácidos.

Productos KIN para el cuidado de la sensibilidad dental

La línea Cariax Desensibilizante KIN, previene y combate la hipersensibilidad dental al frio o al calor. Cuenta con una pasta dental y un enjuague bucal pensados especialmente para el cuidado diario de dientes sensibles, incluye flúor en su formulación que brinda protección al esmalte.

Para un cuidado más específico, KIN tiene a tu disposición el gel dentífrico SensiKIN y el spray bucal SensiKIN, que además de permitir una cómoda aplicación en la zona afectada, proporcionan una acción rápida y efectiva.

Sea cual sea la causa de la sensibilidad dental, existe una solución concreta para luchar contra ella, evitando que se convierta en un problema del día a día. ¡Encuentra el mejor tratamiento y olvídate de los dientes sensibles!

La entrada La sensibilidad dental, ¿tiene solución? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Qué causa la sensibilidad dental

No hay grupos de riesgo para la sensibilidad dental, puede sucederle a cualquiera. El síntoma más común es un repentino y agudo destello de dolor cuando los dientes están expuestos al aire, al frío, a los alimentos dulces, ácidos o calientes. Algunas personas pueden experimentar sensibilidad dental al cepillarse o usar hilo dental. 

En las piezas dentales sanas, el esmalte protege la capa subyacente de dentina, que es más suave que el esmalte. A su vez, las raíces de los dientes están protegidas por cemento, hueso y encías. Sin embargo, hay ciertas situaciones que provocan que la dentina quede expuesta como, por ejemplo, su desgaste, la recesión de las encías, la caries, los dientes rotos o la erosión de las raíces, entre otros. La dentina es un tejido poroso responsable de transmitir los impulsos nerviosos desde la superficie más externa del diente a la pulpa o nervio dental, es por esto, que, al estar expuesta, se desencadena el dolor en los dientes sensibles ante estímulos.  

La dentina contiene miles de túbulos microscópicos también conocidos como canales, que conducen a la pulpa del diente. Cuando se exponen a ciertos elementos externos, estos túbulos dentinarios permiten que el calor y el frío lleguen al nervio dentro del diente, causando dolor. 

Algunos de los factores que afectan a la sensibilidad dental son los siguientes:

• Cepillarse demasiado fuerte o usar un cepillo de dientes con cerdas duras. Esto puede desgastar el esmalte y hacer que la dentina quede expuesta. También, si la técnica de cepillado no es la correcta puede producir la recesión de las encías. 
• Encías retraídas. Sucede a menudo a causa de enfermedades periodontales o mala técnica de cepillado, dejando la dentina expuesta. 
• Gingivitis. El tejido inflamado y dolorido de las encías puede provocar la exposición de la raíz del diente. 
• Dientes rotos. Estos pueden llenarse de bacterias procedentes de la placa y causar inflamación en la pulpa del diente. En casos más severos, puede conducir a un absceso o infección. 
• Rechinar o apretar los dientes. Con frecuencia trae como consecuencia el desgaste del esmalte. 
• Alimentos ácidos. Si son consumidos en exceso pueden fomentar la erosión del esmalte. 
• Procedimientos dentales. Los dientes pueden quedar más sensibles tras una limpieza bucal en el dentista, un blanqueamiento, un raspado de raíces, el reemplazo de alguna corona y otros procedimientos de restauración dental. Por lo general, el dolor desaparecerá al pasar un par de días. 

Cómo eliminar la sensibilidad dental

Son muchas las causas posibles que pueden estar generando sensibilidad dental. No existe una opción de tratamiento único que funcione de igual forma para todos.  

Es esencial que, si sufres de sensibilidad dental, visites a tu dentista de confianza para que se realice un correcto diagnóstico de la causa. Así, podrá detectar si se debe a una patología que requiere de un tratamiento clínico o si es suficiente tratarla con productos adecuados para disminuir la sintomatología. Si se aborda la razón de la sensibilidad, el tratamiento elegido será más exitoso para disminuir el dolor.  

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Cómo disminuir la sensibilidad de los dientes

Algunas de las recomendaciones más habituales son:  

• Uso de un dentífrico para dientes sensibles. Lo más recomendable es usar una pasta dental fluorada, que además contenga algún agente desensibilizante como el nitrato potásico. 
• Usar un cepillo de dientes de cerdas suaves. 
• Evitar los alimentos altamente ácidos. 
• Usar diariamente un enjuague bucal fluorado acompañado de algún agente desensibilizante. 

• Evite rechinar los dientes. Es muy recomendable hacer uso de una férula de descarga o protector bucal para evitar el bruxismo. 
• Acudir al dentista. Las causas de aparición de la sensibilidad dental son diversas, es el dentista quien determinará cuál es el mejor tratamiento para cada situación. 

Productos para la sensibilidad dental

En época de buen tiempo y calor, es normal experimentar una mayor sensibilidad dental al consumir más bebidas frías y, en especial, helados. Si éste es tu caso y estás buscando cómo calmar el dolor de dientes sensibles, estás en el lugar adecuado. 

La gama de productos SensiKIN es ideal para dientes sensibles. Son productos específicos para obtener una higiene bucal óptima y, al mismo tiempo, aliviar los síntomas de la hipersensibilidad. Se compone de pasta dentífrica y enjuague bucal, para un cuidado diario y prolongado; y gel dentífrico y spray bucal para una acción de choque. 

Podrás elegir el tratamiento para dientes sensibles que más se adapte a tus necesidades y que te permita disminuir las molestias. Y, recuerda, debes acudir inicialmente a un profesional de la odontología para que diagnostique cuál es la causa que te provoca dicha sensibilidad y pueda asesorarte de la mejor manera. 

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La sensibilidad dental es un problema muy común que afecta al 25% de la población adulta.

Consiste en un dolor dental fuerte que aparece tras el contacto con un estímulo exterior (bebidas y/o alimentos ácidos, fríos o calientes).

Los pacientes con bruxismo, los portadores de aparatos de ortodoncia o las personas mayores con gran consumo de fármacos tienen mayor riesgo de sufrir este problema.

Cabe destacar que en los últimos años ha aumentado su incidencia, especialmente en jóvenes, debido a los nuevos hábitos de consumo (abuso de bebidas energéticas, refrescos, etc.).

Es muy importante tratar la sensibilidad dental excesiva (o hipersensibilidad dental), por ello, se debe acudir al odontólogo con el fin de descartar otras patologías, así como realizar un tratamiento adecuado.

Hábitos y cuidados a tener en cuenta

A continuación, ofrecemos algunos consejos básicos para mantener una higiene bucodental adecuada y adaptada a pacientes que sufren de sensibilidad dental:

1) Realizar una dieta equilibrada rica en frutas y pobre en alimentos con azúcares tales como caramelos, bebidas refrescantes, zumos con azúcares añadidos…

2) Utilizar cepillos y accesorios dentales (hilo, seda, cinta o cepillos interdentales) para lograr una limpieza en profundidad.

3) Utilizar enjuagues bucales y pastas dentífricas especialmente formulados con agentes desensibilizantes, altas concentraciones de flúor y baja abrasividad.

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Actualmente el nitrato potásico es el agente desensibilizante más utilizado. Este ingrediente actúa directamente sobre las terminaciones nerviosas situadas en los túbulos dentinarios expuestos, reduciendo así la transmisión de los estímulos dolorosos.

Por otro lado, el flúor a altas concentraciones fortalece la estructura del esmalte dental y las capas expuestas de la dentina, contribuyendo así a controlar las molestias de la hipersensibilidad dental.

Finalmente, la abrasividad de las pastas dentífricas se mide a través de un parámetro denominado RDA (Relative Dentin Abrasivity) cuyo valor depende principalmente del tipo y cantidad de sílice que contengan.

Cuanto mayor es el índice de RDA más abrasiva es la pasta de dientes. Por esta razón, para los pacientes que sufren hipersensibilidad se recomienda el uso de pastas dentífricas con baja abrasividad (RDA por debajo de 70), con el fin de reducir el efecto erosivo en el esmalte dental.

Laboratorios Kin ha desarrollado SensiKIN, una gama de productos específica que contribuye a obtener una óptima higiene oral a la vez que alivia los síntomas de la hipersensibilidad.

Sin duda, un inmejorable aliado en casos de sensibilidad dental.

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Lectura sugerida sobre sensibilidad dental:

Li u HC, et al. (1998) Prevalence and distribution of cervical dentin hypersensitivity in a population in Taipei, Taiwan.J Endod; 24: 45- 7.

Lindhe et al. (1999) Consensus Report – Chronic Periodontitis – Annal of Periodontology – AAP – Chicago v.4, n.1, p.38 (Dec.)

Rees JS, et al. (2003) The prevalence of dentine hypersensitivity in a hospital clinic population in Hong Kong.J Dent; 31: 453-61.

Aguiar et al. (2005) Hipersensibilidade Dentinária – causas e tratamento. Rev Inst Ciênc Saúde jan-mar; 23(1):67-71

Maria C Brunetti; Marilene I Fernandes; Rodrigo G B Moraes FUNDAMENTOS DA PERIODONTIA – Teoria e Prática – 1ª ed. 2007

Desde Laboratorios KIN te animamos a compartir este artículo para ayudar a todas las personas que padecen sensibilidad dental. te animamos a exponer tu caso o hacernos llegar alguna consulta a través de los comentarios.

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