A diferencia de otros tipos de prótesis dentales, los sistemas extraíbles precisan de un mantenimiento muy concreto. ¿Sabes cuáles son las recomendaciones de los especialistas? 

Descubre a través de esta guía cuáles son los cuidados básicos para aumentar la vida útil de las prótesis dentales removibles, favoreciendo su comodidad en el uso diario. 

¿Qué es una prótesis dental removible?

Las prótesis dentales removibles o extraíbles son dispositivos artificiales destinados a reemplazar determinadas piezas dentales y tejidos adyacentes, con la particularidad de que pueden colocarse y retirarse a voluntad en cualquier momento. 

Su finalidad es múltiple: reestablecer una correcta masticación que facilite la deglución de los alimentos, mejorar la estética dental, y en determinados casos, también el habla del portador. 

Una prótesis oral removible se diseña siempre de acuerdo con las necesidades y características orales de cada persona. Son piezas únicas hechas a medida que deben conservarse y cuidarse adecuadamente. 

¿Qué tipos de prótesis existen?

De manera general existen dos tipos de prótesis dentales con las que sustituir la función natural de las piezas dentales dañadas. Ante la pérdida de una o varias piezas dentales, y según el estado de los diferentes tejidos bucodentales del paciente, es necesario hacer una valoración de cuál es el sistema más cómodo y efectivo. 

Prótesis dental fija

Consiste en una prótesis que se coloca directamente sobre el hueso maxilar sujeta a otros dientes naturales. Este tipo de dispositivo ofrece una función similar a la de las piezas dentales originales. 

Prótesis dental removible

A diferencia de las prótesis fijas, las removibles se pueden quitar y poner. Son una solución perfecta en pacientes en los que el hueso maxilar no permite la colocación de una prótesis fija. No obstante, al ponerlas correctamente no se mueven ni molestan al comer, al hablar o al realizar cualquier otra actividad diaria. 

¿Cómo limpiar prótesis dentales removibles?

Las prótesis dentales removibles deben lavarse correctamente después de las comidas. Para ello se emplea un cepillo especial, con el que se logra eliminar mecánicamente los restos de alimentos, evitando la formación de biofilm. 

Es muy importante extremar la limpieza en las partes metálicas de la prótesis, ya que este material es más delicado. 

Además del cepillado tras cada comida, es recomendable el uso de tabletas limpiadoras efervescentes para eliminar las manchas y el biofilm adherido a la superficie de la prótesis. Estas tabletas son efectivas para la suciedad que se acumula en las partes difíciles o más inaccesibles para el cepillo. 

El modo de empleo de las tabletas efervescentes para prótesis dentales extraíbles es muy sencillo. Basta con sumergir la prótesis en agua tibia junto con una de estas tabletas durante al menos 15 minutos. Otra opción sería dejarla toda la noche para prolongar el tiempo de actuación. 

Cuando la prótesis está limpia, y antes de volver a colocarla en la cavidad oral o guardarla en su contenedor, solo hay que enjuagarla con agua. 

Una vez por semana se puede utilizar solución desincrustante para disolver los residuos más difíciles y hacer una desinfección profunda. Con unos 15 – 30 minutos de actuación facilita la limpieza posterior de la prótesis con la ayuda del cepillo. 

Importancia de una buena fijación para las prótesis dentales removibles

Para el cuidado diario de las prótesis dentales, una de las recomendaciones más importantes es realizar una buena fijación. Para ello, el uso de crema fijadora de prótesis dental asegura una sujeción firme y duradera, de tal manera que su portador se sienta cómodo y seguro al utilizarla. 

La crema fijadora se aplica en 3 o 4 puntos en la parte interna de la prótesis antes de su colocación. Una vez preparada, se coloca sobre la encía y se fija presionando con los dedos unos segundos. 

Con la finalidad de asegurar un buen cuidado de las prótesis dentales removibles, éstas no se deben mover ni desprenderse tras la aplicación de la crema fijadora. Una mala fijación favorece que los restos de alimentos queden atrapados entre la prótesis y la encía, generando las circunstancias idóneas para el desarrollo de las bacterias bucodentales que pueden provocar daños en la mucosa de la encía. 

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Consejos para el cuidado de las prótesis removibles

Además de la limpieza y la fijación, hay otros cuidados de las prótesis dentales removibles que hay que tener en cuenta para su fácil mantenimiento. Sigue estos consejos de gran utilidad para mejorar la comodidad a la hora de llevar tu prótesis: 

• Tras la colocación de una nueva prótesis dental, sigue una dieta blanda masticando con cuidado hasta la completa adaptación. 
• Utiliza una crema fijadora adhesiva extrafuerte, colocándola correctamente para evitar que la prótesis se mueva. 
• Al igual que el cuidado de los dientes naturales, es muy importante limpiar la prótesis después de cada comida, siempre con la ayuda de un cepillo especial para prótesis. 
• Limpia con cuidado la mucosa y el paladar que está en contacto con la prótesis. Haz movimientos circulares suaves con el cepillo para masajear y favorecer la circulación. 
• Retira la prótesis por la noche para que los tejidos bucales puedan descansar. 
• Realiza una limpieza profunda de la prótesis a diario usando tabletas limpiadoras efervescentes. 
• Las prótesis son muy frágiles. Manipúlalas con cuidado. 
• Acude a las revisiones periódicas del dentista, y no dudes en pedir una cita si necesitas un reajuste o corrección puntual. 

A través de un correcto cuidado de las prótesis dentales removibles, es posible alargar la vida útil de estos prácticos dispositivos. Cuidar y mantener una correcta higiene bucodental es incluso más importante en portadores de prótesis, para que los tejidos bucodentales disfruten de una buena salud. 

La entrada Prótesis dentales removibles: limpieza y mantenimiento se publicó primero en Laboratorios KIN.

Los retenedores son piezas que se colocan de manera temporal. Sin embargo, el tratamiento en cada paciente puede tener una duración más o menos prolongada según sus necesidades. 

¿Cuál es la función principal de los retenedores de ortodoncia? ¿Cuánto tiempo se deben usar? ¿Y qué cuidados necesitan? Te contamos todos los detalles para que puedas cuidar de tu salud bucodental a lo largo de todo el proceso de ortodoncia. 

¿Qué son los retenedores de ortodoncia?

Gracias al tratamiento de ortodoncia, es posible conseguir la sonrisa perfecta del paciente a través de un proceso de alineación de las piezas dentales. Al terminar, comienza otra etapa muy importante: la fase de retención. 

Los retenedores de ortodoncia son un tipo de aparato que se coloca al terminar la fase activa del proceso ortodóntico. Estos consiguen que las piezas dentales no se vuelvan a desplazar hasta su posición inicial. 

De esta manera se consigue evitar que un paciente tenga que volver a someterse a un segundo tratamiento de ortodoncia porque sus dientes se han movido al no seguir correctamente la fase de retención. 

¿Cómo son los retenedores de ortodoncia?

A diferencia de los aparatos de ortodoncia, los retenedores son piezas más sencillas que pueden colocarse de manera fija o ser completamente removibles. 

Son mucho más discretos y cómodos, y es recomendable usarlos el tiempo indicado para asegurar un total éxito en la recolocación de los dientes para mejorar la funcionalidad de la boca y mejorar su estética. 

Los retenedores se suelen colocar el mismo día en que se retira al aparato de ortodoncia. No obstante, hay opción de colocarlos más adelante si en posteriores revisiones se observan movimientos o cambios dentales significativos. 

Función de los retenedores de ortodoncia

La función de un retenedor de ortodoncia es evitar que una sonrisa perfectamente alineada vuelva a su estado inicial previo al tratamiento. 

Al retirar los aparatos de ortodoncia, es habitual que los dientes intenten volver a su posición natural. Es aquí cuando intervienen los retenedores, que estabilizan las piezas dentales para mantenerlas en su nueva posición. 

¿Qué podría pasar si no se colocan los retenedores dentales? Existe un alto riesgo de que se pierda la alineación y regulación de los dientes lograda durante la ortodoncia. Por lo que es importante realizar un tratamiento completo logrando que la posición de los dientes se asiente correctamente incluso después de los brackets. 

Tipos de retenedores de ortodoncia

En la actualidad existen diferentes aparatos de retención para ortodoncia. Estos se pueden dividir en dos amplios grupos entre los que destacan los retenedores fijos y los removibles: 

Retenedores fijos

Los retenedores de ortodoncia fijos son unas láminas estabilizadoras hechas de metal, fibra de vidrio y otros materiales, colocadas en la parte interior de los dientes. No se ven. 

Según las necesidades de cada paciente, pueden tener un mayor o menor tamaño, colocadas tanto en la parte superior como inferior, de colmillo a colmillo o entre los maxilares. 

Ofrecen la ventaja de que una vez colocadas, el paciente no tiene que preocuparse por su mantenimiento. Sin embargo, precisan de revisiones frecuentes por parte del ortodoncista para comprobar una correcta adhesión al diente. 

Retenedores removibles

Cada vez son más los pacientes que optan por los retenedores de ortodoncia removibles. Consisten en unas férulas transparentes hechas a medida, que se colocan en toda la arcada donde se ha aplicado el tratamiento de ortodoncia, ya sea en la parte superior, inferior, o ambas. 

Al principio del tratamiento es conveniente llevarlas el máximo tiempo posible, retirándolas solo para comer o para su limpieza diaria. Pero pasadas unas semanas o meses, el tiempo de colocación se puede espaciar, llevándolas solo por la noche. Si bien al principio pueden ser un poco incómodas de llevar, son altamente efectivas, y acortan considerablemente el tiempo de la fase de retención. 

Aunque son parecidos a los alineadores invisibles, su función es algo diferente. Eso sí, su mantenimiento y cuidado es muy similar, y deben limpiarse correctamente para evitar que una mala higienización influya de manera negativa en la salud bucodental. 

¿Son necesarios los retenedores?

Hoy en día se ha comprobado que, en la mayoría de los pacientes, el uso de retenedores es recomendable, e incluso imprescindible para lograr los mejores resultados tras un tratamiento de ortodoncia. Ya que suponen una fase más del proceso, de mayor o menor duración en cada paciente. 

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¿Cuánto tiempo se usan los retenedores?

No existe un tiempo mínimo o máximo para llevar este tipo de aparatos dentales. El tratamiento puede prolongarse más o menos en cada persona. 

Como ya hemos visto, la función de los retenedores de ortodoncia es evitar que las piezas dentales vuelvan a moverse. Por lo que el ortodoncista será quien determine en qué momento se ha logrado una buena estabilización de las estructuras de la encía y el hueso mandibular, sin riesgo a que haya nuevos desplazamientos. 

En algunos casos, los retenedores se pueden mantener durante un largo tiempo o para siempre si el paciente lo desea. Cuando la higiene bucodental es la adecuada, no hay ningún problema para mantener los retenedores fijos como parte de la estructura de la boca, manteniendo la sonrisa en su posición correcta de manera permanente. 

Cómo limpiar los retenedores de ortodoncia

La limpieza de los retenedores de ortodoncia se realiza dentro de la rutina de higiene dental habitual. Cada vez que te laves los dientes tras una comida, y sobre todo antes de ir a dormir, es importante limpiar correctamente los retenedores. 

El proceso de higienización será diferente en los retenedores fijos o removibles. Concretamente los retenedores removibles se limpian por separado, retirándolos de la boca para cepillarlos y enjuagarlos correctamente. 

En el caso de los retenedores fijos, es importante saber que en el punto exacto donde se insertan los alambres en los dientes existe un alto riesgo de formación de biofilm bacteriano. Hay que incidir en esta zona durante el cepillado dental para asegurar la completa eliminación de bacterias y restos de alimentos. 

Sigue siempre las instrucciones dadas por el ortodoncista para limpiar los retenedores de ortodoncia correctamente. Durante las revisiones periódicas, un profesional puede detectar más fácilmente si existe algún fallo en el cepillado y mantenimiento de la salud general de la boca. 

La entrada ¿Para qué sirven los retenedores de ortodoncia? se publicó primero en Laboratorios KIN.

El cepillado de los dientes con brackets es similar y al mismo tiempo diferente al de una boca que carece de estos. Al encontrarse en el interior de la cavidad bucal unas piezas que no pertenecen a la boca, es más común que queden restos de comida adheridos, aumentando el riesgo de formación de placa. 

¿Sabes cómo cepillarte los dientes con brackets correctamente? Te contamos paso a paso en qué consiste el proceso. 

Utilización de brackets

La ortodoncia es la especialidad dentro de la odontología que corrige y previene las alteraciones en la posición de los dientes y maxilares. Para ello, hoy en día existen diferentes tipos de técnicas, entre las que podemos diferenciar las que utilizan los aparatos de ortodoncia fijos y los removibles.  

Cada una de estas técnicas de ortodoncia requiere un mantenimiento y una técnica de cepillado adecuada. Si bien los portadores de aparatos de ortodoncia removibles pueden retirarlos para facilitar su higiene bucodental, en el caso de la utilización de brackets el cepillado requiere un procedimiento más específico. 

En esta ocasión nos centraremos en cómo cepillarse los dientes con brackets para evitar infección e inflamación de las encías. Con una higiene bucal completa, el paciente portador de aparatos de ortodoncia fijos podrá prevenir problemas habituales como manchas en los dientes, acumulación de sarro, caries y halitosis, entre otros. 

¿Por qué es tan importante hacer una correcta limpieza de los dientes?

La higiene bucodental es muy importante para el mantenimiento de la salud de la boca. A través del cepillado y del uso de diferentes accesorios, se previenen y se tratan diferentes enfermedades que comienzan en la boca y que pueden afectar a la salud general. 

Cuando un paciente se somete a un tratamiento de ortodoncia para la alineación de los dientes, la necesidad de prevenir infecciones bucales es aún mayor. No hay que olvidar que, durante todo el tratamiento, la boca queda más expuesta a alteraciones y daños que podrían desembocar en enfermedades periodontales. 

Con el fin de lograr unos mejores resultados en la colocación de las piezas dentales, el paciente deberá seguir las indicaciones concretas de su ortodoncista. De esta forma la boca se mantendrá más sana y protegida. 

Cepillarse los dientes con brackets no conlleva mucho tiempo ni esfuerzo extra. Tan solo es necesario adaptar la rutina de limpieza bucodental a las necesidades particulares de cada persona. 

Cómo cepillarse los dientes con brackets paso a paso

Antes de centrarnos en cómo cepillarse los dientes con brackets, cabe destacar cuáles son las herramientas básicas que todo paciente necesita tener a mano. Entre ellas se encuentran el cepillo dental, que puede ser manual o eléctrico, cepillos interdentales o hilo dental, y por supuesto, dentífrico y enjuague bucal. 

De manera general, todo portador de ortodoncia deberá hacer un cepillado completo después de cada comida, dedicando un tiempo que puedes oscilar entre los 5 y los 10 minutos. 

Preparación antes del cepillado

Antes de comenzar con el cepillado, es conveniente retirar cualquier parte móvil del aparato para facilitar la tarea. También es conveniente hacer un enjuagado con agua para eliminar al máximo los restos de alimentos que hayan quedado entre los brackets después de la comida. 

Limpieza del aparato dental

El siguiente paso es el cepillado del aparato dental, para el cual utilizaremos el cepillo de dientes y una pequeña cantidad de dentífrico. Pasa el cepillo alrededor de los alambres y las piezas fijas en un ángulo de 45 grados para llegar a todos los rincones. 

Limpieza de dientes y encías

Si es necesario, enjuaga el cepillo y vuelve a aplicar dentífrico para continuar con el cepillado de dientes y encías. Limpia los dientes uno a uno haciendo una leve presión con movimientos circulares para no dañar el esmalte ni las encías. 

Conocida como la técnica de Charters, la recomendación es colocar las cerdas del cepillo sobre el borde gingival en un ángulo de 45 grados para acceder mejor a todos los espacios interdentales y los huecos bajo los brackets. 

Puedes saber más sobre las diferentes técnicas de cepillado dental en esta sección del blog de KIN. 

Repite el procedimiento tanto en la cara externa de los dientes como en la cara interna. También en la superficie de masticación de las piezas dentales posteriores, donde se suele acumular mayor cantidad de restos de alimentos. 

Uso de seda dental

Aunque lo recomendable es utilizar la seda dental o los cepillos interdentales en cada cepillado, es imprescindible que se haga al menos una vez al día, preferiblemente por la noche antes de acostarse. 

Pasa el hilo o el cepillo interdental por cada uno de los espacios entre los dientes, de manera suave para no provocar daños en las encías. 

Enjuague con colutorio

Termina la higiene bucodental enjuagándote los dientes con un colutorio de uso diario que contenga flúor. De esta forma estarás eliminando los restos de alimentos que hayan podido quedar, así como las bacterias responsables de la formación de biofilm en dientes y encías. 

No te olvides de revisar tu aparato de ortodoncia frente al espejo, asegurándote de que tus dientes están completamente limpios. No deben quedar restos ni en las piezas dentales ni en los brackets. 

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Recomendaciones para el cepillado

Independientemente del tipo de ortodoncia que porte el paciente, hay una serie de recomendaciones de los profesionales en odontología para el cuidado de la salud bucodental durante el tratamiento: 

• Sigue una rutina de limpieza completa después de cada comida. 
• Es posible utilizar tanto un cepillo manual específico para ortodoncia, como un cepillo de dientes eléctrico con cabezal pequeño y redondo que facilita el acceso a las zonas más recónditas de la boca. 
• Escoge un cepillo de cerdas de dureza media para no dañar las encías, más expuestas durante la ortodoncia. 

• Además de la limpieza de los dientes y los brackets, asegura una correcta limpieza de encías, mejillas, lengua y paladar. 
• Limpia el cepillo al terminar de lavar los dientes, retirando también los restos de dentífrico. 
• Sustituye el cepillo dental o el cabezal del cepillo eléctrico cada 2-3 meses, o cuando notes que las cerdas estén visiblemente desgastadas. 
• Acude a las revisiones odontológicas según la fecha indicada por el profesional para un correcto seguimiento del tratamiento. 

Ante cualquier duda sobre como cepillarse los dientes con brackets, pregunta directamente a tu odontólogo u ortodoncista. De la misma forma, si detectas cualquier síntoma de inflamación, sangrado, acumulación excesiva de biofilm dental o desprendimiento de alguna pieza del aparato de ortodoncia, pide cita rápidamente. 

La entrada ¿Cómo debo cepillarme los dientes con Brackets? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Si bien se recomienda el uso de ortodoncia en la infancia o adolescencia con el objetivo de abordar los problemas desde edades tempranas, en el que las estructuras de los dientes y maxilares se están definiendo, en adultos también se pueden lograr buenos resultados. Partiendo de una buena salud, los dientes de los mayores se pueden mover y recolocar en su sitio a través de diferentes sistemas. 

¿Quieres saber en qué consiste la ortodoncia para adultos y en qué situaciones está recomendada? Resolvemos todas tus dudas para que te decidas a dar el paso definitivo. 

¿Vale la pena la ortodoncia en adultos?

Hace algunos años, los adultos nos resistíamos a utilizar la ortodoncia para corregir la posición y forma de nuestros dientes. Pero los tiempos han cambiado, y según las estadísticas, uno de cada tres pacientes adultos que acuden a consulta deciden mejorar su sonrisa a través de algún tratamiento de ortodoncia. 

Debido a la mayor demanda en adultos, los tratamientos que existen en la actualidad están más adaptados a sus necesidades. Con una eficacia mucho mayor, es posible corregir la forma de los dientes a nivel estético, pero también solucionar problemas de maloclusión para favorecer una buena salud bucodental. 

Hoy en día tenemos a nuestro alcance productos de higiene bucodental especiales para portadores de ortodoncia, que evitan la acumulación de placa dental y otras alteraciones frecuentes. 

La línea de productos OrthoKIN está compuesta por un dentífrico y un enjuague bucal que contienen en su formulación clorhexidina, citrato de zinc y flúor, para prevenir la caries dental y fortalecer el esmalte. Recomendado para uso diario, mejora la comodidad durante el tratamiento para que al terminar luzcas una sonrisa perfecta y saludable. 

Brackets después de los 30

En la actualidad hay personas de 20 años en adelante que deciden someterse a un tratamiento de ortodoncia para adultos. Aquellos que por cualquier motivo no pudieron corregir su sonrisa durante la infancia, tienen una segunda oportunidad a cualquier edad. 

Hay pacientes que, a partir de los 30 años, de los 40, 50 o incluso 60 años, quieren lucir una sonrisa bonita. Otros se vuelven a someter a un segundo tratamiento cuando sus dientes se han movido durante la fase de retención en la primera intervención cuando eran jóvenes. 

Al igual que en los niños, los brackets a partir de 30 años pueden corregir diferentes problemas tales como: 

• Apiñamiento dental 
• Dientes torcidos 
• Espacio entre los dientes (diastemas) 
• Mordida abierta 
• Mordida cruzada
• Sobremordida 

Hay que tener en cuenta que los tratamientos en adulto son algo más complicados que la ortodoncia en niños, ya que los huesos maxilares están completamente formados y el tratamiento puede tardar más para hacer la misma corrección. 

¿Cuál es el límite de edad para poner brackets?

No existe un límite de edad para llevar ortodoncia. El único requisito para poder someterse a este tipo de tratamiento odontológico es tener una buena salud bucodental. 

Para que la ortodoncia sea 100% efectiva, el paciente deberá disfrutar de una correcta salud en los dientes, las encías y tejidos periodontales que sujetan las piezas dentales. 

De todas formas, cuanto más joven sea el paciente, más fácil será conseguir los resultados deseados con la ortodoncia en un periodo de tiempo menor. A medida que envejecemos, la respuesta de los tejidos será diferente ante estos tratamientos. 

Para saber si eres un buen candidato para la ortodoncia, lo mejor es consultar con un profesional que haga una valoración previa del estado de la boca y los resultados que se podrían esperar. 

¿Cuántas veces se pueden usar brackets en la vida?

En un principio, un tratamiento de ortodoncia es para toda la vida. Sin embargo, hay personas que durante su juventud pasan por ello, y en la etapa adulta vuelven a notar que su sonrisa ha experimentado cambios. 

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La recomendación en estos casos es recurrir a un buen profesional que aplique el tratamiento de ortodoncia más adecuado y al finalizar este, valore la opción de colocar retenedores para que los dientes no vuelvan a moverse. 

¿Cuál es el mejor tratamiento de ortodoncia para adultos?

Todos los tipos de tratamiento de ortodoncia se pueden adaptar a las necesidades de los adultos. La elección de uno u otro dependerá de dos factores muy importantes: el precio y la estética. 

El aparato más económico son los clásicos brackets metálicos, que a veces son rechazados por los mayores porque se ven demasiado, o interfieren en la comodidad de su vida diaria. 

Sin embargo, los brackets de zafiro o la ortodoncia invisible son la otra alternativa, mucho más discreta, que no afecta a la estética de su portador, ya que difícilmente se aprecian. 

Ortodoncia invisible para adultos

El tratamiento de ortodoncia invisible es un tipo de ortodoncia que no conlleva la colocación de brackets. Consiste en el uso de férulas transparentes o alineadores, que el paciente va cambiando cada cierto tiempo para cambiar la posición de sus dientes progresivamente. 

Los alineadores ejercen una presión suave sobre los dientes, moviéndolos de manera muy delicada hasta el lugar deseado. Ofrecen la ventaja de que se pueden quitar para comer o lavarse los dientes, aunque para una mayor efectividad, es recomendable usarlos como mínimo 22 horas al día. 

Descubre más sobre las recomendaciones de ortodoncia fija y ortodoncia invisible para adultos a través de esta completa guía. 

Si los brackets te parecen un tratamiento demasiado visible y no te apetece tener que llevarlos durante tanto tiempo, esta puede ser una excelente alternativa para que nadie note que tienes ortodoncia. 

¿Cuándo se empiezan a notar los cambios con los brackets?

Ya sea a través del uso de brackets como de ortodoncia invisible, cualquier paciente en edad adulta podrá empezar a notar los primeros cambios alrededor de los 3 meses. Es necesario tener en cuenta que se trata de un proceso lento, por lo que hay que tener paciencia. 

Según el estado inicial del paciente, en algunos casos hay que esperar hasta el sexto mes para apreciar los primeros efectos. No obstante, como portador de un aparato de ortodoncia, notarás que está haciendo efecto al sentir la leve presión que ejerce sobre los dientes para ir moviéndolos poco a poco hasta la posición deseada. 

La ortodoncia en adultos ofrece muy buenos resultados en casi la totalidad de los casos, siempre y cuando se sigan las indicaciones del ortodoncista para el cuidado de los dientes y encías. Si quieres ver resultados tempranos, cuida bien tu boca, y tanto tú como los demás notaréis el cambio. 

La entrada Ortodoncia en adultos ¿Es conveniente? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Pero ¿qué cuidados específicos necesitan este tipo de prótesis dentales? ¿Es posible lograr que funcionen y se conserven como el primer día durante toda la vida?

Vamos a analizar cuáles son los consejos de los expertos en odontología e implantología para el cuidado y mantenimiento de los implantes dentales. La prevención es esencial para evitar daños y complicaciones futuras en cada pieza sustituida.

Qué cuidados requieren los implantes

Justo después de la intervención para la colocación de un implante dental, es habitual que el paciente sienta pequeñas molestias o sufra de inflamación localizada en la zona afectada. Estos síntomas, en mayor o menor medida según cada persona, son transitorios y suelen desaparecer en una semana aproximadamente.

Tras la cirugía, el especialista indicará al paciente determinados cuidados a seguir para que la intervención sea exitosa:

• Cuidar la dieta durante los primeros días, evitando tomar alimentos sólidos.
• Evitar alimentos muy calientes.
• No fumar.
• Evitar el esfuerzo físico o la práctica de ejercicio intenso.
• Tomar la medicación recetada según las pautas del odontólogo.
• Realizar una higiene bucodental completa con productos y accesorios específicos para la zona operada.

Poco a poco se irá produciendo la recuperación total tras la intervención, y estas recomendaciones podrán cambiarse por otras a largo plazo. Cada caso es diferente, ya que tras la colocación de una prótesis dental fija o removible, la recuperación del paciente conllevará un mayor o menor plazo de tiempo.

También cabe destacar que, aunque los implantes tienen la misma función y aspecto que las piezas detales naturales, precisan de un cuidado específico para reducir la aparición de complicaciones y evitar su rechazo en el futuro.

Consejos para el cuidado y mantenimiento de los implantes dentales

La falta de cuidado y mantenimiento de los implantes dentales podría producir un problema de salud bucal conocido como enfermedad periimplantaria. Se trata de una enfermedad infecciosa que afecta a los tejidos que rodean el implante dental y el hueso donde se ha integrado, llegando a provocar la pérdida del propio implante.

Para la prevención de la periimplantitis, el mejor consejo es un adecuado control de la placa para evitar las enfermedades de las encías. Además de ello, estas son otras pautas para el cuidado y mantenimiento de los implantes dentales:

Higiene bucodental diaria

Es común en algunos pacientes que, tras la colocación del implante dental, la encía tienda a retraerse ligeramente, quedando una pequeña concavidad entre la corona y el tejido periodontal. Por este motivo es muy importante realizar una higiene bucodental tras cada comida, evitando la acumulación de restos de alimentos y la formación de biofilm.

Además del uso de un cepillo de dientes de cerdas suaves, existen dentífricos específicos para el cuidado posterior a la intervención en las encías. La pasta dentífrica GingiKIN B5 / KIN B5 refuerza las encías y controla el biofilm dental, previniendo la caries y las enfermedades periodontales.

Uso del irrigador bucal

El irrigador dental es un dispositivo de limpieza muy útil para retirar los restos de alimentos en zonas difíciles. Expulsa un chorro de agua a presión, eliminando la placa bacteriana y la suciedad entre la corona del implante y la encía.

Uso de los cepillos interproximales

Junto con el cepillado y el irrigador dental, el uso de los cepillos interproximales resulta de gran utilidad para completar la higiene bucodental en aquellos portadores de prótesis. Perfectos para los espacios entre los dientes, también se pueden sustituir por la seda dental según las necesidades de cada paciente.

Enjuagues bucales

Los colutorios son una parte muy importante del mantenimiento de la salud bucodental en general. Para aquellos pacientes que han pasado por una intervención de colocación de implante dental, existen enjuagues bucales específicos que ayudan a la recuperación del tejido periodontal.

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Control de la dieta

La dieta influye de manera directa en el cuidado y mantenimiento de los implantes dentales. El consumo de alimentos ricos en vitaminas y minerales para la protección de las encías es esencial para que estas se mantengan sanas.

Además, es importante evitar tomar alimentos demasiado duros para prevenir fracturas en la prótesis externa del implante. Aunque están compuestos por materiales muy duros y resistentes, estos pueden ceder ante elevadas presiones.

Protección de la prótesis

Evita al mismo tiempo acciones que puedan perjudicar la salud e integridad de tus dientes. Un ejemplo de ello es mordisquear objetos duros, o utilizar palillos dentales para eliminar restos de alimentos.

Los pacientes que padecen de bruxismo, o rechinado de dientes, pueden encontrar una gran mejoría y protección de sus dientes naturales e implantes con el uso de férulas de descarga.

Abandono de hábitos nocivos

Es muy importante cuidar de las encías a través de la eliminación de hábitos poco saludables como el tabaquismo y el consumo de alcohol, o al menos hacer una reducción drástica de estos.

Revisiones odontológicas frecuentes

Por último, cabe destacar la importancia de realizar las correspondientes revisiones con el odontólogo cada 6 meses durante los primeros años, para después ir espaciándolas anualmente si no se detecta ningún problema.

Nadie mejor que un experto en el mantenimiento de la salud bucodental para vigilar la salud de los tejidos periimplantarios. Ante cualquier duda sobre el cuidado y mantenimiento de los implantes dentales, lo mejor es pedir cita con un especialista para que te ayude a proteger tu salud bucodental general.

La entrada 8 Consejos para el mantenimiento de los implantes dentales se publicó primero en Laboratorios KIN.

En los últimos años, la tecnología de colocación de implantes ha avanzado a pasos agigantados. Debido a ello, algunos conocimientos han quedado obsoletos, y surgen nuevas cuestiones sobre este tipo de intervención en la consulta dental. 

¿Quieres saber qué es un implante y cómo se coloca correctamente? Con esta guía profundizamos en el proceso para descubrir cuáles son los cuidados que necesita la boca para su completa y rápida recuperación. 

¿Qué es un implante dental?

Un implante dental es un tornillo de titanio u otros materiales que se introduce en el hueso maxilar para después colocar una prótesis o corona que queda fuertemente fijada. A través de este proceso es posible reponer un diente perdido, recuperando la funcionalidad y aspecto anterior. 

Con la cirugía de implantes, hoy en día se puede reemplazar de manera eficiente la raíz del diente, colocando una corona artificial que cumple con el mismo cometido que el diente natural. 

Esta es una excelente alternativa a las dentaduras removibles o a la colocación de dientes con puentes, mucho más resistente, duradera y cómoda. 

Partes del implante dental

Al igual que las piezas dentales naturales, los implantes están compuestos por diferentes partes. En este caso, al tratarse de una pieza artificial, cada una de estas partes se puede separar para facilitar su colocación. 

Estos son los elementos que constituyen los implantes dentales: 

1. Cuerpo. Consiste en un tornillo que se introduce en el hueso maxilar como anclaje. Tiene la misma función que la raíz del diente, sujetando la pieza fuertemente para que no se mueva ni se desprenda. 
2. Pilar. Se trata de una pequeña pieza que actúa a modo de unión entre el implante y la corona. 
3. Corona. Esta es la parte exterior que queda visible por fuera del hueso y la encía. Tiene la forma del diente natural, imitando su aspecto y función. 

Durante la colocación de los implantes, cada una de estas piezas se va fijando paso a paso, en este orden, hasta conseguir una buena adaptación de los tejidos de la encía. 

¿De qué material son los implantes dentales?

Para la colocación de un implante dental es necesario recurrir a un material que sea capaz de integrarse con el hueso maxilar, disminuyendo el riesgo de rechazo por parte del organismo. Dentro de las diferentes opciones existentes, son dos los materiales utilizados con mayor frecuencia por su alta biocompatibilidad: 

Implantes de titanio

El titanio es el material más utilizado en la colocación de implantes dentales. Se trata de un tipo de metal muy ligero y duro, muy empleado en la osteointegración por la tasa de biocompatibilidad que tiene con el tejido óseo en la mayoría de los pacientes. 

Implantes de zirconio

El zirconio es una excelente alternativa para este tipo de tratamientos por su elevada durabilidad. Aunque algo más caro, la biointegración del zirconio es muy buena en el hueso maxilar, curando rápidamente. 

¿Cómo se coloca un implante dental?

La colocación de un implante dental es un proceso de entre 3 y 6 meses de duración. En este tiempo se asegura una correcta sujeción del implante al hueso de la mandíbula. 

Los pasos son los siguientes: 

Preparación del paciente

El primer paso es hacer un análisis de las necesidades del paciente y una previa preparación antes del tratamiento. En caso necesario, se realiza una extracción del diente dañado antes de colocar el implante. 

Colocación del implante

En la siguiente sesión ya se puede empezar a colocar el implante. Tras una limpieza y desinfección de la zona, así como aplicación de anestesia local, el odontólogo comienza con la intervención. 

En determinados pacientes se debe hacer un injerto óseo, sobre el cual se trabajará posteriormente. Tras abrir la encía y dejar el hueso expuesto, se hace la perforación y la colocación del implante. 

En la mayoría de los casos, es necesario cerrar y dejar que cicatrice la encía facilitando la osteointegración del implante. Este proceso puede durar entre 1 semana y 3 meses según el nivel de cicatrización del paciente. 

Siguiendo las recomendaciones del odontólogo, es muy importante que el paciente cuide los tejidos periodontales para una mejor recuperación. PerioKIN Hyaluronic 1% es un gel bucal que refuerza y tonifica las encías delicadas tras la operación, reduciendo al mismo tiempo la formación de biofilm dental. 

Confección de la corona

Haciendo un estudio de la boca del paciente, el siguiente paso en la consulta es la confección de la corona personalizada en cuanto a tamaño, forma y color. 

Colocación del pilar del implante

El último paso consiste en una cirugía menor con anestesia local, en la que se expone el implante anteriormente colocado y se posiciona el pilar. 

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¿Cuánto dura un implante dental?

Los implantes dentales están pensados como una solución fuerte y de larga duración a la hora de sustituir una pieza dental perdida. No obstante, la durabilidad de cada pieza dependerá de varios factores en cada paciente. 

La elección del material del implante, así como la experiencia del profesional que se encargará de colocarlo, influyen directamente en la efectividad del tratamiento. Los mejores materiales y un procedimiento correcto aseguran que el implante dure más años. 

Así mismo, el estilo de vida del paciente determina también la durabilidad del implante. Una correcta higiene bucodental, cuidar la salud de las encías y los tejidos internos que actúan como sostén para el implante, así como la protección de las piezas para evitar fracturas, son determinantes para aumentar su durabilidad. 

Por lo general, el 90% de los implantes duran 10 años o más, antes de tener que reemplazarlos. La vida útil de estos puede ser de hasta 20 años o más aportándoles los cuidados necesarios. 

Cómo evitar problemas con los implantes dentales 

Los implantes dentales son la mejor solución a largo plazo para sustituir las piezas perdidas. El procedimiento de colocar una prótesis definitiva es complejo dado que una vez colocado el implante hay que esperar unos meses para que los tejidos cicatricen y el implante quede bien fijado.  

Durante los meses de espera, el paciente deberá seguir las recomendaciones del dentista para su cuidado. Los puntos más importantes para evitar complicaciones y alargar la duración del implante dental son la higiene dental diaria, seguir un estilo de vida saludable y asistir a las revisiones odontológicas.  

Encuentra más información a través de esta completa guía para evitar problemas con los implantes que encontrarás en el blog de KIN. 

La entrada Qué es un implante y cómo se coloca se publicó primero en Laboratorios KIN.

El estilo de vida actual, en el que hay un elevado consumo de bebidas y alimentos que tiñen los dientes (como el café, el té, el vino y algunos refrescos) favorece la aparición progresiva de manchas en los dientes, volviendo el esmalte cada vez más amarillo. Con el paso del tiempo, la sonrisa se va apagando, de manera que la dentadura se aleja del ideal estético que deseamos conseguir. 

¿Por qué se manchan los dientes? ¿Es normal tener una sonrisa extremadamente blanca? ¿Cómo conseguir unos dientes más blancos sin dañar el esmalte dental? Respondemos a todas tus preguntas para que mantengas tu dentadura siempre saludable y brillante. 

La tonalidad de nuestros dientes

La tonalidad de los dientes suele variar de una persona a otra. El color viene determinado por factores genéticos. El tono de los dientes está marcado por el color de la propia dentina. 

La dentina es el tejido interno de los dientes. Se encuentra protegida por el esmalte dental, un tejido de alta dureza y resistencia que presentan una tonalidad blanca. Con el paso del tiempo, el esmalte tiende a desgastarse en un proceso que es absolutamente normal. 

Al entrar en contacto con determinadas sustancias que colorean el esmalte, los dientes se van volviendo amarillos, con un color más apagado, y la capa se va haciendo más fina por el desgaste. 

El color natural de los dientes viene definido por la edad de la persona, por el tipo de pieza dental, los cuidados recibidos, la raza, el color de piel, y otros factores externos. 

Unificar el tono para que todos luzcan la misma sonrisa blanca es imposible. Sin embargo, las actuales técnicas de blanqueamiento dental permiten la recuperación del tono inicial del esmalte, y son muy útiles para aclarar el color natural del propio diente. 

¿Por qué se manchan los dientes?

Las manchas dentales son pequeñas imperfecciones que van apareciendo poco a poco en la superficie del esmalte. Son múltiples los motivos por los que los dientes se manchan, pero entre los más frecuentes podemos destacar los siguientes: 

• Higiene bucal deficiente. 
• Consumo de alimentos y bebidas con colores intensos. 
• Tabaquismo. 
• Determinados tratamientos médicos que afectan la integridad del esmalte. 
• Traumatismos dentales. 

Las manchas en los dientes pueden ser superficiales, más fáciles de tratar, o producirse en las capas más profundas del esmalte. 

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¿Por qué se ponen los dientes amarillos?

Los dientes se vuelven amarillos debido al proceso de envejecimiento natural del esmalte dental. Cuando la capa externa que protege el diente se va desgastando, deja la dentina al descubierto poco a poco, con una coloración más amarillenta. 

De manera genética, hay personas que tienen unos dientes más blancos, y otras que presentan una coloración ligeramente amarilla. Esto es totalmente normal, y se debe a la composición mineral del esmalte en cada persona. 

No obstante, si los dientes no se cuidan adecuadamente, tienen mayor tendencia a sufrir un envejecimiento prematuro, amarilleándose antes de tiempo. 

¿Quieres evitar que tus dientes se vuelvan amarillos? La clave está en cuidarlos desde la infancia y a lo largo de toda la vida. ¡Es mucho más sencillo de lo que crees! 

Trucos para dejar los dientes blancos

Como ya hemos visto, la coloración de los dientes es un proceso natural que se da con la edad. Es imposible mantener siempre la misma tonalidad blanca perlada en las piezas dentales a medida que nos hacemos mayores. Pero hay algunos trucos que te pueden ayudar a mejorar el aspecto de tu sonrisa. 

Los tratamientos de blanqueamiento dental se han puesto de moda en los últimos años. Estos consisten en la aplicación de un producto que actúa sobre el esmalte eliminando las manchas para lograr una coloración más blanca y brillante. 

Muchos de estos tratamientos se realizan en la clínica dental para obtener los mejores resultados. También hay otros que se pueden llevar a cabo en casa. 

¿Quieres sabes qué tipos de blanqueamientos dentales existen y en qué consiste cada uno? Descúbrelo a través de este enlace en el blog de KIN. 

Si bien los tratamientos blanqueantes más efectivos son los llevados a cabo en la clínica dental, hay otros productos de higiene bucodental totalmente seguros y efectivos que se pueden utilizar en casa. Entre ellos destacan los dentífricos y enjuagues bucales con propiedades blanqueadoras para el esmalte dental. 

Productos recomendados para lucir unos dientes más blancos

En la actualidad existen muchos tipos de pastas de dientes con función blanqueadora para conseguir una dentadura más blanca y brillante. No todas son igual de efectivas, y algunas incluso pueden ser dañinas para el esmalte dental, con una formulación poco adecuada para el cuidado de los dientes. 

La pasta dentífrica FKD Blanqueadora KIN es un producto apto para uso diario. Contiene bicarbonato sódico micropulverizado, que ayuda en la eliminación progresiva de las manchas, recuperando o manteniendo el blanco natural del esmalte. 

Gracias a su formulación suave, no daña el esmalte y es respetuosa con las encías. Contiene flúor en una cantidad adecuada para la prevención de caries. 

Consejos para mantener los dientes blancos

Además del uso de productos blanqueantes para los dientes, si quieres lucir una dentadura más saludable y blanca hay otros consejos básicos que puedes poner en práctica a diario: 

Cepillado dental

Realiza el cepillado de los dientes correctamente siempre después de cada comida. Este debe ser completo, evitando que la suciedad y las manchas se acumulen sobre el esmalte con el paso del tiempo. 

El uso de hilo dental (o de cepillos interdentales) y colutorios son una ayuda extra para mantener a raya la placa bacteriana. Evita que los dientes pierdan su tonalidad natural con estas sencillas prácticas. 

Visitas frecuentes al dentista

Es inevitable que con el paso del tiempo el esmalte dental sufra determinados daños. Por ello es tan importante realizar una visita anual al dentista, así como una higiene profesional más profunda con cierta periodicidad. 

El odontólogo podrá detectar a tiempo cualquier problema en dientes y encías, dándote las recomendaciones precisas para ponerle solución temprana. Ir al dentista no es solo cuestión de estética. Hazlo sobre todo por tu salud oral. 

Dieta saludable para los dientes

Seguir una dieta equilibrada, rica en alimentos saludables para los dientes es de vital importancia. El esmalte y la dentina de la dentadura necesitan un correcto aporte de vitaminas, minerales y otras sustancias beneficiosas que incluyen de manera directa en su aspecto y coloración. 

Evita el consumo de alimentos y bebidas que provocan la coloración de los dientes, así como la formación de caries y la acumulación de sarro por exceso de alimentos azucarados y ácidos que acaban por amarillear los dientes. 

El abanico de posibilidades a la hora de conseguir unos dientes más blancos es muy amplio. Consulta con tu dentista o tu farmacéutico cuáles son los productos más adecuados para blanquear los dientes, manteniendo tu sonrisa sana y perfecta todos los días del año. 

La entrada ¿Cómo conseguir unos dientes más blancos? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Podemos encontrar distintas opciones en función de nuestras necesidades y objetivos, como las técnicas de ortodoncia fija tradicionales y los nuevos tipos de ortodoncia invisible removible. No hay ningún tipo de ortodoncia que sea mejor que otra y la elección de una determinada técnica dependerá de los problemas a corregir y de las preferencias de cada paciente. Lo más adecuado, es que sea un ortodoncista quien realice las recomendaciones sobre las ventajas y desventajas de cada una de ellas.

Cualquier tipo de ortodoncia tiene la misma finalidad, corregir los dientes y huesos de la boca que se encuentren en posición incorrecta. Un tratamiento de ortodoncia va mucho más allá de la mera cuestión estética, ya que evita y previene problemas bucodentales como, por ejemplo, el desgaste de los dientes por una mala mordida, una mala respiración o incluso la desfiguración del rostro. Los tratamientos de ortodoncia son aconsejables en personas que presenten problemas de mala oclusión dental (cualquier grado de contacto irregular de los dientes del maxilar superior con los del maxilar inferior).

Con respecto a la edad límite para iniciar un tratamiento de ortodoncia podemos decir que, si bien lo más común es realizar este tipo de intervenciones odontológicas en niños a partir de los 12 años, cualquier adulto entre 20 y 70 años puede someterse al mismo tratamiento en función de sus necesidades.

Problemas que corrige la ortodoncia en adultos

El trabajo que realiza un ortodoncista no es solamente un tratamiento estético de la boca de sus pacientes. Una mala alineación de los dientes conlleva diferentes tipos de patologías que pueden ser prevenidas y corregidas mediante ortodoncia.

Entre los principales problemas que la ortodoncia puede corregir en los adultos destacan los siguientes:

• Mala posición de las piezas dentales.
• Diastema o presencia de espacios entre piezas dentales.
• Dientes apiñados debido a la falta de espacio en la arcada dental.
• Mordida cruzada: cuando los dientes de la arcada superior quedan por detrás de los dientes inferiores.
• Mordida abierta: cuando los dientes frontales o posteriores no están en contacto debido a la existencia de arcada superior, dejando así un gran espacio entre los dientes superiores e inferiores.
• Sobremordida: cuando los dientes superiores cubren verticalmente los dientes inferiores.
• Línea media desplazada: cuando la línea media de los dientes superiores no coincide con la de los dientes inferiores.
• Problemas de apnea del sueño: cuando el paciente tiene problemas respiratorios debido a una mala posición de los dientes.

Como podemos comprobar, además de lograr una sonrisa perfecta y mucho más estética, los pacientes que se someten a un tratamiento de ortodoncia consiguen una correcta colocación de las piezas dentales, y mejoran su salud, así como su calidad de vida.

Tipos de ortodoncia

En función del momento en que se lleve a cabo la técnica de ortodoncia podemos encontrar los siguientes tipos:

• Ortodoncia preventiva. Ortodoncia enfocada a llevar a cabo pequeñas correcciones en los dientes, así como a controlar malos hábitos y disfunciones.   
• Ortodoncia interceptiva. Se suele llevar a cabo en niños durante la dentición temporal (de leche) o mixta, entre los 6 y 10 años, y está indicada para corregir las alteraciones incipientes de mala oclusión. Tiene una finalidad de modificación ósea, contribuyendo de manera positiva al desarrollo de una dentición permanente armoniosa, funcional y estética. 
• Ortodoncia correctiva. Habitualmente se realiza en edad juvenil y adulta para resolver un problema existente de mala oclusión, de morfología y de estética facial.  

Técnicas de ortodoncia

Técnicas de ortodoncia fija

Esta técnica de ortodoncia no puede ser retirada por el paciente en ningún momento. Está indicada para malas posiciones, dientes rotados, cerrar espacios dentarios y mala oclusión.

Existen varios tipos, en función del material que se emplea en el aparato y el lugar de la boca donde va situado. Los más habituales son:

• Brackets metálicos. Es el tipo de ortodoncia fija más tradicional. Son los más resistentes a mordeduras e incluso golpes. Permiten corregir toda clase de problemas de alineación, mordida y posición de los dientes. La principal desventaja de los brackets metálicos es su aspecto, que al ser de metal llaman la atención y son poco estéticos.
• Brackets de cerámica. El material empleado permite que el diseño sea más estético frente a los aparatos metálicos habituales. Además, es posible su colocación sólo en los dientes frontales y permite combinarlos con el sistema tradicional para que los brackets metálicos queden ocultos.
• Brackets de zafiro. Son los más discretos y resultan casi invisibles. Producen menos molestias por su menor tamaño, lo que redunda en menos rozaduras en encías y en la parte interior del labio. Además, al ser de zafiro son muy resistentes.
• Ortodoncia lingual. Un tipo de ortodoncia invisible que se coloca en la parte interna de los dientes, reduciendo de esta forma los problemas estéticos. Cada bracket se fabrica a la medida de cada diente, teniendo como base una reproducción exacta de la superficie lingual sobre la que se va a colocar. Esta técnica es menos duradera que una ortodoncia tradicional. Otro de los factores a su favor es que permite una mejor higiene durante todo el tratamiento.

Técnicas de ortodoncia removible

Una ortodoncia removible permite que el paciente pueda retirarla, por ejemplo, para comer o cepillarse los dientes. Como en el caso de la ortodoncia fija, la ortodoncia removible necesita un seguimiento por parte de un ortodoncista. Es el caso de la ortodoncia invisible, unas férulas transparentes de plástico duro que se cambian cada varios días.

Esta técnica se basa en la colocación de alineadores transparentes, prácticamente imperceptibles, que se renuevan habitualmente cada dos semanas. Cada funda se fabrica específicamente para realizar un movimiento concreto y progresivo de los dientes y así colocarlos en la posición que se necesite. A medida que se cambie de alineador, los dientes se van moviendo hasta que la corrección sea total.

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Ventajas e inconvenientes de la ortodoncia fija

Los tradicionales brackets de la ortodoncia fija son el sistema más utilizado todavía en la actualidad debido a su gran relación calidad precio logrando muy buenos resultados. Ofrecen las siguientes ventajas:

• Hoy en día, los nuevos sistemas han evolucionado tanto, que resultan mucho más cómodos de llevar, evitando la fricción y las molestias.
• Además de los clásicos brackets metálicos, se utilizan materiales más discretos como la porcelana o el zafiro que se camuflan con el color del diente.
• Un tratamiento con brackets suele tener menor duración que otras técnicas de ortodoncia, lo que acortaría considerablemente el tiempo que se tarda en realizar el procedimiento completo.

También tienen una serie de inconvenientes:

• Resultan más visibles y por lo tanto más antiestéticos.
• No se pueden quitar para lavarse los dientes o comer.

Ventajas e inconvenientes de la ortodoncia invisible

La nueva ortodoncia invisible ha supuesto toda una revolución en el mundo de la odontología. Muchos adultos que nunca se habían animado a llevar brackets por cuestiones principalmente estéticas, por fin han dado el paso para corregir esas pequeñas imperfecciones. 

La ortodoncia invisible ofrece las siguientes ventajas: 

• Pasa totalmente desapercibida.
• Es muy cómoda.
• Permite retirarla por el paciente para su limpieza y para comer.
• Se cambia cada dos semanas.
• Muy higiénica debido al fácil cepillado.
• Permite practicar deportes de contacto.
• Permite mantener una estética y ritmo de vida que requieren pacientes con mucha vida social o de reuniones y viajes constantes.
• No interfiere en la rutina diaria.
• Menos problemas con llagas y rozaduras

Como inconvenientes podemos señalar:

• Esta técnica de ortodoncia es la más cara del mercado.
• Los tratamientos suelen durar más.

Nunca es tarde para lucir una sonrisa perfectamente alineada y más saludable. Para ello debemos contactar con profesionales de la ortodoncia y dar con el tratamiento más adecuado para nuestro problema, escogiendo entre las nuevas técnicas de ortodoncia fija o la ortodoncia invisible. El tipo de ortodoncia que elijamos dependerá de factores como el estado actual de nuestra dentadura, la duración que queramos que tenga el tratamiento y nuestras posibilidades económicas.

La entrada Ortodoncia fija vs. Ortodoncia invisible para adultos se publicó primero en Laboratorios KIN.

Si bien las prótesis dentales fijas no necesitan prácticamente ningún mecanismo especial para mantenerlas en su sitio a lo largo del día, las prótesis removibles sí que pueden resultar algo molestas cuando no se sujetan de la manera adecuada.

¿Sabes cuáles son las alternativas para fijar una prótesis dental removible? Te contamos todo lo que debes saber para sujetarlas cómodamente y que no se muevan al hablar o al masticar.

Tipos de prótesis dental

La principal función de una prótesis dental es la de devolver a la boca su completa funcionalidad. Estas sustituyen las piezas dentales perdidas y pueden adaptarse en número y forma para atender a las necesidades de cada persona.

Hay dos tipos de prótesis dentales: fijas o removibles. Cada una de ellas puede ser una excelente opción para mejorar la calidad de vida del paciente.

Prótesis dental removible

Las prótesis dentales removibles tienen la ventaja de que se pueden retirar fácilmente por parte del paciente, sin necesidad de que intervenga un profesional, facilitando su higiene.

Estas prótesis tienen un soporte mucoso que está en contacto directo con la encía, y sobre el que se insertan las piezas dentales sustitutivas. Para asegurar que queda bien sujeta a la mucosa, existen diferentes productos que la fijan de una manera cómoda y segura.

Cómo fijar una prótesis dental

Las dentaduras removibles tienen una menor estabilidad al colocarlas en la boca. No todas se adaptan al 100% a la forma de las encías del paciente, por lo que en ocasiones es preciso utilizar algún tipo de adhesivo para que no se mueva.

En el mercado hay varias alternativas para fijar una prótesis dental, evitando que se caigan incluso en situaciones extremas como al masticar algún alimento duro.

Cremas adhesivas

Las cremas adhesivas son la solución que mejor se adapta a todo tipo de dentadura. Con la aplicación de una pequeña cantidad de producto, la dentadura queda sujeta a la encía, protegiendo la mucosa frente a irritaciones.

Almohadillas adhesivas

Otra alternativa a las cremas adhesivas son las almohadillas. Estas pueden resultar muy útiles durante el periodo de adaptación de la boca a la nueva prótesis, ya que la mucosa puede irritarse con facilidad.

Las almohadillas adhesivas sujetan la prótesis dental y al mismo tiempo crean una capa protectora que evita los roces y pequeñas heridas.

Adhesivos en polvo

De manera tradicional se han usado adhesivos en polvo para fijar una prótesis dental (aquí hay más información con esta guía de prótesis e implantes dentales). Hoy en día son menos comunes, pero siguen siendo una alternativa bastante eficiente. Su aplicación es muy sencilla: se pone el polvo entre la encía y la prótesis, que se activa al contacto con la saliva para fijarla.

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¿Cuál es el mejor pegamento para dentadura postiza?

Sin duda alguna, la mejor opción para fijar una prótesis dental son las cremas adhesivas. Con una formulación más suave para el cuidado de la mucosa bucal, las nuevas cremas tienen una mayor durabilidad a lo largo del día.

¿Cuánto dura la acción del adhesivo para prótesis dentales?

La duración del efecto del adhesivo para fijar una prótesis dental dependerá de múltiples factores. Por un lado, hay que destacar el tipo de adhesivo elegido, siendo más duraderas las cremas en comparación a las almohadillas o los polvos adhesivos.

El tipo de alimento o bebida ingerido a lo largo del día puede afectar a la integridad del producto fijador.

Por lo general, estos adhesivos se aplican una sola vez al día, en el momento de colocar la prótesis por la mañana. En el caso de que el producto no haga bien su efecto y sea necesario aplicarlo con frecuencia, la recomendación es consultar el problema con el odontólogo para encontrar la mejor solución.

Limpieza y cuidados de la prótesis dental removible

Tanto o más importante que la fijación de la prótesis dental es hacer un buen mantenimiento de esta. Para que dure mucho más tiempo, evitando la irritación de la mucosa bucal, es imprescindible retirarla a diario para una limpieza completa.

La recomendación es quitar la prótesis antes de ir a dormir, evitando que se acumule sobre ella la suciedad que da lugar al crecimiento de microorganismos. La limpieza de la prótesis se realiza introduciéndola en agua tibia junto con un limpiador específico.

Para acabar con esta explicación de cómo fijar una prótesis dental, antes de volver a colocar la prótesis en la boca hay que aclararla con abundante agua, o puede limpiarse con un cepillo dental específico para ella.

La entrada ¿Cómo fijar una prótesis dental? se publicó primero en Laboratorios KIN.

Aunque están compuestas por materiales altamente resistentes, no debemos olvidar que las carillas no son tan fuertes como el propio esmalte dental. Estas también necesitan de unos cuidados específicos para prolongar su duración al máximo.

¿Sabes cómo cuidar las carillas dentales para que se sigan viendo naturales como el primer día? Te damos las mejores recomendaciones para que las pongas en práctica:

¿Qué son las carillas dentales?

Las carillas dentales son un tipo de prótesis dental que consiste en una fina lámina adherida a la superficie del diente. A través de ellas se busca corregir el color, la forma o el tamaño de las piezas dentales, mejorando el aspecto de la sonrisa instantáneamente después de su colocación.

Son muchos los tipos de materiales que se utilizan en la fabricación y diseño de las mismas. Entre los más comunes, destacan las carillas de composite, de porcelana o de resina, cada una con diferentes características, ventajas y desventajas que determinarán su elección por parte del paciente.

Cuidados y recomendaciones para las carillas dentales

De la misma forma que es importante cuidar la salud del esmalte dental, las finas láminas de porcelana o composite que forman las carillas precisan de un cuidado extra. Las carillas quedan pegadas a la cara externa del diente a través de un fuerte pegamento. Sin embargo, con el paso del tiempo se pueden desprender o empezar a cambiar su aspecto.

Las carillas de composite duran alrededor de 5 años, mientras que las de porcelana, que son más resistentes, entre 10 y 15 años. Tras evaluarte, será el odontólogo la persona responsable de asesorarte sobre la mejor opción de tratamiento.

Si quieres que tus carillas duren lo máximo posible, cuídalas como tus dientes naturales siguiendo estas recomendaciones:

Evita comida y bebidas con colorantes

Sobre todo, en el caso de las carillas de composite. Estas tienden a mancharse fácilmente cuando se consumen alimentos y bebidas oscuros con frecuencia. El café, el vino tinto, el té, los refrescos de cola, frutos rojos, salsa de soja y el chocolate negro son algunos de los alimentos y bebidas de los que no se debe abusar para que las carillas mantengan su color natural.

Evita alimentos duros y pegajosos

Las carillas se pueden romper debido al consumo de alimentos muy duros, por lo que se recomienda ser muy cuidadoso a la hora de consumirlos y preferiblemente cortarlos o triturarlos usando los dientes posteriores. Los alimentos pegajosos suponen también un gran riesgo para estas, ya que favorecen que se despeguen.

Evita el tabaco

Otra de las sustancias que más pueden oscurecer y alterar el aspecto de las carillas dentales, así como de los propios dientes naturales, es la nicotina del tabaco. Esta puede afectar al tono de las carillas A su vez, el tabaco es muy perjudicial y se aconseja reducir o eliminar por completo su consumo.

Cepillado de dientes

Imprescindible en todos los casos. El cepillado de dientes es primordial para mantener la integridad de las carillas dentales. Estas no están exentas de la formación de biofilm dental y la acumulación de sarro.

La pasta dentífrica GingiKIN B₅, con cloruro de cetilpiridinio (CPC) entre otros ingredientes, ayuda a controlar el biofilm dental tanto sobre el esmalte de los dientes naturales como en las carillas.

A su vez, contiene flúor y xilitol que previenen las caries y refuerzan el esmalte dental, además de provitamina B₅ y vitamina B₃ que tonifican las encías.

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Uso de hilo dental

No debemos olvidarnos de la importancia de la limpieza interdental, ya que entre las piezas dentales se acumulan gran parte de las bacterias bucales. El uso del hilo dental, o en su caso, de los cepillos interdentales, asegura una mayor limpieza en toda la boca.

Uso de enjuague bucal

Para terminar la higiene bucodental y proteger la integridad de las carillas, los colutorios son el mejor complemento. El enjuague bucal GingiKIN B₅ tras el cepillado ofrece una completa protección antiplaca, fortaleciendo el esmalte y las encías.

Morder objetos duros

Un mal hábito que es totalmente incompatible con el uso de carillas dentales es mordisquear objetos duros de forma recurrente como un bolígrafo. Esta costumbre podría dañar el material, que con el tiempo se hace más frágil y puede romperse o despegarse.

No utilizar los dientes como herramienta

Otro hábito común y perjudicial para los dientes es usarlos para abrir objetos, cortar determinados materiales o sujetar algunas cosas duras y pesadas. Sin darte cuenta, estas pequeñas manías te pueden pasar factura en el esmalte dental, pero sobre todo en tus delicadas carillas.

Tratar el bruxismo

Aquellas personas que padecen de bruxismo, apretando la mandíbula o rechinando los dientes de manera involuntaria, tienen mayor riesgo de rotura en sus carillas. Para evitarlo, el uso de una férula de descarga supone una gran ayuda para tratarlo y evitar el desgaste de las piezas dentales.

Visitar al dentista

Una visita anual al dentista para la correspondiente revisión y limpieza bucodental profesional es otra de las medidas para el cuidado de las carillas dentales. De esta forma es posible detectar cualquier tipo de problema para tratarlo de manera anticipada.

Mantenimiento de las carillas

Adicionalmente, las carillas necesitan su propio mantenimiento según el tipo de material que las compone. Estas revisiones deben hacerse cada 5 a 10 años en función del material por el que esté compuesto la carilla. Durante esta evaluación el profesional valorará su estado y si es necesario su sustitución o algún tipo de tratamiento para mantenerlas en una situación adecuada.

Acudir de urgencia al dentista ante cualquier problema

No dudes en visitar a tu odontólogo lo antes posible si detectas cualquier cambio en la forma o composición de tus carillas. Si por cualquier motivo estas se desprenden, comienzan a moverse, o presentan coloraciones extrañas, es importante actuar a tiempo para evitar daños mayores.

Cuida tus dientes y tus carillas dentales con mucho mimo a través de estas recomendaciones, y durarán intactos por más tiempo. Utiliza los mejores productos para obtener grandes resultados. ¡Lo notarás!

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