La importancia del calcio para una sonrisa saludable

El calcio es uno de los minerales fundamentales para la salud de nuestro organismo y el desarrollo de muchas de las estructuras que lo componen. Seguro que ya habías oído hablar de la importancia del calcio para los dientes y huesos, pero exactamente, ¿cómo asimila el cuerpo este mineral procedente de la dieta?

Junto con una buena higiene bucal, los expertos en odontología recomiendan seguir una dieta equilibrada y rica en todo tipo de nutrientes. Concretamente el calcio es un mineral esencial para la dentadura, y su deficiencia podría estar relacionada con múltiples problemas bucodentales frecuentes.

¿Qué es el calcio y por qué es tan importante para la salud dental?

El calcio es uno de los minerales más abundantes en el cuerpo humano. Su presencia es más que evidente en el esqueleto, ya que forma parte del tejido óseo, el tejido cartilaginoso, y también de otros como los músculos o el esmalte dental.

¿De dónde procede este calcio? La mayor parte viene de la dieta, concretamente de alimentos ricos en este mineral como son los derivados lácteos, frutos secos, semillas, pescados, mariscos, legumbres y hortalizas.

En una dieta sana y equilibrada es necesario incluir alimentos ricos en calcio, así como otros minerales y vitaminas que intervienen en su correcta asimilación. Solo de esta manera es posible almacenar y reponer la cantidad de calcio que necesita el organismo para mantener una salud óptima y permitir a los diferentes tejidos que cumplan con su función.

¿Y todo esto cómo influye en la salud de la boca y los dientes? Pues precisamente en la formación y el mantenimiento de estructuras tan importantes como son el hueso maxilar, el hueso mandibular, las piezas dentales y el esmalte que las recubre para su protección.

¿Cómo se remineralizan los dientes?

Además de los huesos, los dientes son otro de los órganos del cuerpo que mayor contenido en calcio presentan. Este no solo se encuentra en el interior del diente, sino también como parte del esmalte, el tejido que lo protege frente al ataque de diversos agentes externos.

En el día a día, el esmalte dental puede verse afectado por el desgaste mecánico y el ataque de las bacterias bucales responsables de la caries. A través de un proceso llamado desmineralización, el esmalte va perdiendo grosor, y puede llegar a romperse o destruirse en gran medida.

Para evitar que esto ocurra hay que conseguir el efecto contrario, la remineralización de los dientes. De manera natural, el calcio y los fosfatos de la saliva se depositan en las zonas dañadas, recuperando la capa protectora que el diente ha perdido.

En este proceso de remineralización del diente entra en juego el flúor, otro mineral muy importante en el depósito y mantenimiento del calcio en el organismo. Además del flúor que se encuentra en los alimentos, el uso de dentífricos y enjuagues bucales fluorados es un complemento para tener en cuenta para la protección del esmalte dental.

¿Cómo pasa el calcio a los dientes y los huesos?

El calcio participa en muchos de los procesos más importantes que se producen en el cuerpo humano. Ayuda en la contracción muscular, permite la correcta coagulación de la sangre cuando se produce una herida o hemorragia, y también es un estimulador del impulso nervioso.

Pero donde es más notorio su papel, sin duda, es en el tejido óseo y en el tejido dental. Para que el cuerpo obtenga la cantidad de calcio necesaria para mantener este tejido, es de suma importancia incluir en la dieta alimentos que aseguren un correcto aporte.

Desde los alimentos, y gracias a la digestión, el calcio pasa al torrente sanguíneo y de ahí a los distintos tejidos del cuerpo. La vitamina D favorece la absorción del calcio en el intestino y por tanto su incorporación y la de otros minerales en el tejido óseo, manteniéndolo fuerte y saludable.

El calcio en la etapa infantil

En la etapa adulta, el recambio mineral que se produce en los huesos es mínimo. El tejido óseo apenas pierde calcio, y, por lo tanto, no es necesario estar reponiéndolo constantemente. A medida que nos hacemos mayores, este proceso entra en una especie de estado de reposo, y lo más importante es simplemente mantener una correcta densidad en los huesos.

Pero, ¿qué pasa en la etapa de crecimiento infantil? El esqueleto y los dientes de los niños están en constante crecimiento. Es por este motivo que el calcio es un mineral esencial e imprescindible en la dieta de los más pequeños.

La ingesta recomendada de calcio va aumentando a lo largo de la vida desde valores mínimos en el recién nacido, hasta un pico máximo en la adolescencia, manteniéndose después estable al llegar a la etapa adulta.

Desde la salida de los dientes de leche, durante el recambio dentario en niños, y la posterior formación de la dentadura definitiva, el calcio es uno de los nutrientes clave para la salud bucodental.

Para el cuidado bucal infantil existen productos de higiene concretos que se adaptan a las necesidades de los niños en cada etapa, ayudando en los momentos más críticos cuando el riesgo de formación de caries dental es mayor.

Signos de déficit de calcio en los dientes

Se conoce como hipocalcemia al déficit de calcio en el organismo. Este puede aparecer a cualquier edad, pero es especialmente delicado durante la infancia y en la tercera edad, cuando el cuerpo no tiene suficiente capacidad para regular los depósitos de este mineral.

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El déficit de calcio está asociado a una serie de síntomas que se manifiestan sobre todo en la boca. Los primeros en los que influye la hipocalcemia son los dientes, con una mayor probabilidad de sufrir caries, debilidad del esmalte dental, sensibilidad, o incluso problemas de deglución.

Antes de llegar a este punto, en el que los huesos, los dientes, y sobre todo el esmalte dental se ven afectados, podemos intervenir de diferentes maneras, asegurando un nivel adecuado de calcio.

¿Qué es bueno para aumentar el calcio en los dientes?

Existen dos vías de aporte de calcio para los dientes importantes en el cuidado de la salud bucodental. Por un lado, está el calcio de la dieta, el más importante, que asegura unos dientes fuertes y saludables, además de un buen desarrollo de los huesos de la mandíbula.

Para ello, es importante seguir una dieta rica en este mineral y en vitamina D. Además de leche, queso, yogur y otros derivados, es interesante tomar frutas, verduras, frutos secos y legumbres, que mejoran el aporte general de nutrientes.

En el caso de los niños pequeños, destacamos otra vía de aporte de calcio, como es el uso de productos de higiene bucodental que fortalecen el esmalte. La línea FluorKIN Calcium está indicada para la prevención de la caries dental desde la erupción de los primeros dientes y a lo largo de toda la etapa infantil.

Durante el periodo crítico de la formación y desarrollo de los dientes de leche y dientes definitivos, FluorKIN Calcium aporta el calcio y fósforo que el esmalte dental necesita para reforzarse y activar el proceso natural de remineralización.

El calcio además se encuentra en la saliva y ayuda a neutralizar los ácidos que dañan el esmalte, logrando un efecto completo para mantener la boca totalmente sana.

BIBLIOGRAFÍA

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